Córdoba: bondades ambientales del caribe colombiano
La Agencia Nacional de Hidrocarburos y la CVS, identificaron los determinantes ambientales presentes en los municipios

Córdoba: bondades ambientales del caribe colombiano / Imagen:123RF
En la actualidad, una de las prioridades a la hora de realizar proyectos de construcción es verificar las características y determinantes ambientales de las zonas donde se van a realizar estos trabajos; esto, con la intención de no afectar el ecosistema del territorio y provocar daños no solo ambientales sino económicos a las poblaciones.
Por esta razón, la Agencia Nacional de Hidrocarburos – ANH, en el marco del fortalecimiento a las corporaciones autónomas y su articulación con la CVS, realizó la identificación de estas características ambientales de los municipios de Cotorra, San Pelayo, Cereté, San Carlos, Ciénaga de Oro, San Andrés de Sotavento, Chinú, Sahagún y Pueblo Nuevo, en el departamento de Córdoba.
De igual manera, el fortalecimiento contempló la clasificación de las recomendaciones de uso de los nueve municipios donde se utilizó como insumo principal los determinantes ambientales identificados y las áreas de interés ambiental encontradas en cada uno de estos.
Lo anterior permitió que se crearan mapas de zonificación de usos para cada uno de los municipios donde se puede evidenciar si una zona es de preservación, de uso sostenible o de recuperación. Por ejemplo, en el caso particular del municipio de San Carlos, el territorio está compuesto principalmente por áreas de preservación, mientras que el de Cotorra tiene más zonas de recuperación y uso sostenible (con restricción).
De acuerdo con la ANH, para poder utilizar esta información se deben tener en cuenta los estándares determinados por la autoridad ambiental de la respectiva jurisdicción, con relación a “la reserva, alindamiento, administración o sustracción de los distritos de manejo integrado, los distritos de conservación de suelos, las reservas forestales y parques naturales de carácter regional; las normas y directrices para el manejo de las cuencas hidrográficas y las directrices y normas expedidas por las autoridades ambientales para la conservación de las áreas de especial importancia ecosistémica”.
Para terminar, los resultados de este proyecto esperan convertirse en insumo para los planes de ordenamiento que regulen el uso, transformación y ocupación de los diferentes territorios.



