Rescatista denuncia inefectividad en la esterilización de perros ferales en el embalse del Neusa
“Cada nueva camada aumenta el riesgo sanitario, ambiental y ético”, asegura la denunciante, quien dice que se han hecho jornadas de esterilización en las zonas rurales del embalse sin atender a los perros ferales.
Cogua, Cundinamarca
Una rescatista independiente denuncia que el Instituto de Protección y Bienestar Animal de Cundinamarca (IPYBAC) "lleva años evadiendo la esterilización de las perritas ferales que habitan en el embalse del Neusa“, la fuente de abastecimiento hídrico ubicada al noroccidente de la Sabana de Bogotá entre los municipios de Cogua y Tausa.
“Tenemos a dos perras ferales que llevan varios años en reproduciéndose sin ningún control. En reiteradas ocasiones le he pedido al IPYBAC que me ayude a hacer jornadas de esterilización. Efectivamente las hacen, pero como las perritas no tienen dueño, no tienen ningún responsable, ellas no han sido esterilizadas”, explica.
Según relata a Caracol Radio, pese a que la entidad cuenta con los implementos para capturarlas de manera segura y esterilizarlas, esto no ha sucedido, una situación que genera un impacto negativo sobre el ecosistema del embalse y perpetúa el sufrimiento de los animales. “Cada nueva camada aumenta el riesgo sanitario, ambiental y ético”, apunta.
“Ya son aproximadamente 17 perros”, agrega. La mayoría de estos animales enfrentarían situaciones de vulnerabilidad: “Las perritas están en desnutrición, están enfermas (...) no tienen un techo y las condiciones de clima son muy adversas”.
Situación “incontrolable”
Entre los recursos con los que cuenta el IPYBAC, la rescatista resalta los dardos anestésicos y el personal entrenado para usarlos. Esto permitiría su captación de forma segura, de modo que se podría atender así una situación que califica como “incontrolable”.
“Siempre me dicen lo mismo: que no las pudieron coger, que les dañaron la trampa. Tienen siempre infinidad de excusas para atrapar a las perritas, pero pues ellos tienen los dardos, que es la forma más fácil para capturar a unas perras ferales”, indica.
Incluso asegura que recientemente estuvo en el embalse del Neusa y vio que llevaron unas jaulas: “Las perras ferales son muy inteligentes, ellas no se van a meter a la jaula... Vi que dejaron la jaula, ni siquiera la armaron. Entonces, no les veo voluntad de querer hacerlo”.
La denunciante insiste en que ha recurrido a todos los canales formales durante varios años y dice tener claro en qué parte del embalse están las perritas, “les he dicho en varias ocasiones que si necesitan algún apoyo de mi parte, yo estoy presta, pero siempre salen con la misma excusa”.
En este sentido, añade que el año pasado decidió apersonarse del asunto y consiguió una jornada de esterilización en Cogua por medio de la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria (UMATA), con la administración anterior del parque. Dice que el administrador del embalse se comprometió a que alguno de sus guardias de seguridad le ayudarían a montar los perros al camión, pero eso no sucedió y perdió 500 mil pesos en dicho esfuerzo.
Caracol Radio se puso en contacto con el Instituto; sin embargo, todavía no recibe respuesta sobre la denuncia. Por su parte, la denunciante hace un llamado a fundaciones de cuidado animal y a la ciudadanía en general a que se haga presión a la entidad para conseguir una jornada de esterilización especialmente ideada para estos animales. y ético”, apunta.