Pueblo Barí denuncia graves violaciones de derechos humanos en el Catatumbo
La comunidad reporta más de 200 jóvenes reclutados, además de secuestros, desapariciones y hostigamientos.
Comunidad Motilón Bari
Norte de Santander.
El pueblo indígena Barí lanzó una fuerte alerta sobre la crítica situación de violencia que atraviesan sus 23 comunidades en el Catatumbo, donde han sido víctimas de desapariciones, secuestros, amenazas y hostigamientos en medio de la confrontación entre grupos armados que hacen presencia en la región.
Alexander Dora, coordinador de Derechos Humanos de la comunidad Barí, aseguró que los recientes hechos ocurridos en Tibú y Ocaña han generado gran preocupación, especialmente por la desaparición de un guardia indígena y el hostigamiento contra estudiantes.
“Estamos muy preocupados porque se han metido con nuestros jóvenes, niños y niñas adolescentes. Hemos denunciado, enviado comunicados y solicitado acciones, pero no hemos tenido una respuesta contundente del Gobierno Nacional”, afirmó.
Uno de los datos más alarmantes entregados por la organización es que, desde 2020, se han documentado 246 casos de reclutamiento de jóvenes Barí por parte de actores armados.
Este año, advirtió Dora, la situación se ha recrudecido y el número de víctimas ha aumentado.
La comunidad también denunció nuevas formas de intimidación, como el uso de drones para vigilar y perseguir a sus líderes y autoridades.
“Nos siguen y nos intimidan por medio de estas tecnologías, buscando silenciar a quienes defendemos la autonomía y el gobierno propio en nuestro territorio”, explicó el líder indígena.
Los voceros insistieron en que el Estado no ha brindado garantías reales de protección, a pesar de los múltiples llamados de atención.
“No hay seguridad del gobierno como tal hacia nuestras comunidades. Lo que vemos es abandono”, señaló Dora.
El pueblo Barí reiteró el llamado urgente al Gobierno Nacional para que atienda de manera inmediata esta crisis humanitaria y se adopten medidas que protejan la vida e integridad de las familias indígenas del Catatumbo, quienes hoy se sienten en completo estado de indefensión.