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Gobierno Trump revoca visa a juez brasileño que maneja caso contra expresidente Jair Bolsonaro

Según el secretario de Estado Marco Rubio, el jurista ha creado una “cacería política contra Jair Bolsonaro con un complejo de persecución y censura”.

Gobierno Trump revoca visa a juez brasileño que maneja caso contra expresidente Jair Bolsonaro

El gobierno de Donald Trump ordenó revocarle la visa al juez brasileño Alexandre de Moraes, quien lleva actualmente el caso contra el expresidente Jair Bolsonaro por intento de golpe de Estado, a sus “aliados en la corte” y a sus familiares.

“El presidente Donald Trump dejó claro que su administración exigirá responsabilidades a los extranjeros responsables de la censura de la libertad de expresión en Estados Unidos”, expresa el secretario de Estado Marco Rubio.

Estados Unidos califica el preceso contra Bolsonaro como una “cacería política del juez Alexandre de Moraes, del Tribunal Supremo Federal de Brasil, contra Jair Bolsonaro creó un complejo de persecución y censura tan amplio que no solo viola los derechos fundamentales de los brasileños, sino que también se extiende más allá de las fronteras de Brasil y afecta a los estadounidenses”.

Esto sucede después de que la Corte Suprema de Brasil ignoró la presión del presidente de EE.UU., Donald Trump, contra el juicio por golpismo que enfrenta el exmandatario Jair Bolsonaro, quien desde ahora será objeto de nuevas medidas cautelares y tendrá sus movimientos vigilados mediante una tobillera electrónica.

La decisión fue adoptada por el juez de Moraes por lo que calificó como una “obstrucción de justicia” en la que habría incurrido Bolsonaro al “inducir, instigar y auxiliar a un Gobierno extranjero a la práctica de actos hostiles contra Brasil”.

Además de la tobillera, colocada a Bolsonaro en la sede de la Policía Federal tras un registro policial a su domicilio, Moraes dictó otras cautelares respaldadas de inmediato por la Primera Sala del Supremo, en la que cursa el juicio por intento de golpe.

Deberá permanecer en su casa durante la noche, no podrá usar sus redes sociales ni contactar a diplomáticos extranjeros, acercarse a embajadas o hablar con otros de los procesados, incluido su hijo y diputado Eduardo, quien se encuentra en Estados Unidos desde hace casi cinco meses.