Sindicato de Ecopetrol enfrentados por denuncias contra el presidente, Ricardo Roa
UTIPEC acusa a la USO de favorecerse indebidamente de la administración de Ricardo Roa, mientras el respaldo del sindicato aliado genera divisiones entre los trabajadores de Ecopetrol
Ricardo Roa Barragán, Presidente de Ecopetrol. Foto: Camila Díaz/Colprensa
La polémica en torno a las denuncias de nepotismo y tráfico de influencias contra Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol, ha generado una profunda división entre los principales sindicatos de la compañía. Mientras la Unión Sindical Obrera (USO) respaldó públicamente a Roa y desestimó las acusaciones, el sindicato UTIPEC, liderado por Alejandro Ospina, arremetió tanto contra la USO como contra la administración de Roa.
En un comunicado reciente, la USO criticó la credibilidad de las denuncias, atribuyéndolas a Alejandro Pinzón, un exdirectivo de los oleoductos ODL y Ocensa, quien fue despedido en agosto por conflictos éticos. Sin embargo, UTIPEC no comparte esa posición y señaló que las acciones de la USO evidencian una relación cuestionable entre el sindicato y la administración de Ecopetrol.
Alejandro Ospina, presidente de UTIPEC y representante del segundo sindicato más grande de Ecopetrol, expresó su preocupación por lo que calificó como “fenómenos de tráfico de influencias, nepotismo y corrupción”. Según Ospina, estas irregularidades forman parte de una estrategia que no solo perjudica a la compañía, sino que también afecta directamente los derechos de los trabajadores y la libre asociación sindical.
“Observamos cómo se hacen manifiestas varias de las advertencias que ya habíamos hecho respecto a los fenómenos de tráfico de influencias, nepotismo y corrupción dentro de Ecopetrol. Hemos advertido sobre la flagrante violación al derecho de libre asociación cuando una organización en particular, que casualmente ha sido favorecida por el actual gobierno, establece un acuerdo secreto que afecta a otras nueve organizaciones suscriptoras de la convención colectiva del trabajo. Hoy, esa organización sindical recibe ingresos injustificados,” afirmó Ospina.
Ospina también cuestionó la postura de la USO:
“Nos sorprende que una organización que siempre se ha jactado de ser la más representativa del sector emita un comunicado de respaldo irrestricto a Ecopetrol y a Ricardo Roa, cuando las denuncias en su contra han sido sustentadas con pruebas contundentes. Esto deja en evidencia un posible acto indebido entre la USO y la administración actual.”
El contexto de las acusaciones
Las tensiones aumentaron cuando UTIPEC denunció meses atrás que la USO, sindicato históricamente ligado a Ecopetrol y liderado en el pasado por Roa, estaría recibiendo beneficios exclusivos de su administración. Según UTIPEC, esta relación privilegiada no solo compromete la independencia de la USO, sino que también margina a otras organizaciones sindicales que representan a miles de trabajadores de la compañía.
Por su parte, la USO insiste en que las denuncias contra Roa carecen de fundamento y responden a intereses particulares de quienes buscan desestabilizar la administración. En su comunicado, la USO defendió la gestión de Roa, destacando su compromiso con la sostenibilidad y el fortalecimiento de Ecopetrol.
La confrontación entre UTIPEC y la USO refleja un clima laboral cada vez más polarizado dentro de Ecopetrol. Mientras algunos trabajadores se sienten representados por las posturas de UTIPEC y su llamado a la transparencia, otros ven en la USO un aliado estratégico para garantizar la estabilidad de la empresa en tiempos de incertidumbre.