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“La familia no ha recibido llamadas extorsivas”: Policía sobre empresario desaparecido

En Barranquilla, desde el pasado 2 de noviembre, no se sabe nada del paradero de Gustavo Montenegro González

Empresario desaparecido.

Crece la tensión de la familia de Gustavo Enrique Montenegro González, la cual no sabe nada del paradero del empresario y comerciante desde el pasado 2 de noviembre cuando llegó a Barranquilla con su familia y desapareció ese mismo día en cercanías del barrio Barlovento.

En conversación con Caracol Radio, la Policía de la ciudad indicó que un grupo del Gaula y la Sijín están al tanto de las averiguaciones, en conjunto con la Fiscalía, debido a que hay una información que aún no descarta y es que Montenegro González podría estar secuestrado.

Esto tras este medio consultar con fuentes de la Fiscalía y estas confirmar que el empresario y comerciante habría sido subido a una lancha, que estaba fondeando en el río Magdalena, y donde lo esperaban sujetos armados para llevarlo por el río Magdalena, en dirección al municipio de Sitionuevo.

“Estamos articulando capacidades de Gaula y Sijín en la búsqueda para que podamos lograr información de este señor. La familia no ha recibido llamadas extorsivas. Ahora mismo todas las hipótesis del caso están abiertas y ahora hay que averiguar todos los motivos que rodean esta desaparición”, sostuvo el coronel Dave Figueroa, comandante Operativo de la Policía de Barranquilla.

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Desaparición

El pasado 2 de noviembre, de acuerdo con investigadores de la Fiscalía, Montenegro González salió a reunirse con unas personas al sector de la Intendencia Fluvial, centro de la capital del Atlántico.

El hombre arribó a bordo de su camioneta de alta gama, la cual parqueo a pocos metros de unos restaurantes de la zona.

Seguido, según los informantes, el empresario y comerciante descendió del vehículo, y caminó hasta uno de los locales, donde se sentó en una de las mesas.

De inmediato, de acuerdo con los informantes, dos sujetos lo abordaron y, presuntamente, portando armas de fuego lo obligaron a subirse a una lancha que estaba fondeando en el río Magdalena.

Al parecer, Montenegro González se habría opuesto a la intimidación, por lo que los desconocidos habrían realizado disparos al aire. Segundos después, el comerciante fue llevado a la embarcación, la cual partió con rumbo desconocido.