Desde Sintragasolina aseguran que falta acompañamiento para reconversión laboral
En Cúcuta, un número considerable de familias aún viven de la venta informal de contrabando.
Pimpineros. / Foto: Archivo.
Cúcuta
De las más de 1.700 familias que se dedicaban a la venta informal de combustible en zona de frontera, se cree que aún hay unas 400 que se dedican a esta actividad. La razón sería la falta de acompañamiento en los proyectos de reconversión laboral que estaría impidiendo que estas personas dejen esta actividad informal.
“Se pudo identificar qué ha pasado en los anteriores programas de reconversión y una de las cosas es la falta de capacitación continua y el acompañamiento en los procesos de reconversión es lo que ha impedido que esto no sea exitoso” explicó Yuleima García, presidente de Sintragasolina.
Agregó que “se le ha pedido al gobierno nacional que planteen ese acompañamiento institucional y que verdaderamente se estructuren proyectos que estén de acuerdo a las necesidades de los territorios y a las necesidades que hay en ellos”.
Semanas atrás se adelantó un censo con vendedores de gasolina ubicados sobre el Área Metropolitana, para conocer cómo están en la actualidad estás familias que tienen su sustento diario en la venta informal de combustible.
En Cúcuta es donde más se concentran las familias que aún viven económicamente de esta actividad.