15.000 personas siguen sin electricidad en Valencia y otras 250.000 están sin teléfono

Debido a las fuertes inundaciones en el este de Valencia en España, cerca de 252.000 personas de la zona continúan sin línea de teléfono, mientras que otras 15.000 no tienen electricidad. Sin embargo, algunas carreteras han empezado a despejarse y mañana se abrirán varias líneas de tren para viajes imprescindibles.

De acuerdo con Óscar Puente, Ministro de Transportes y Movilidad Sostenible del Gobierno de España, la conexión ferroviaria entre Valencia y Madrid tardará en operar  “como mucho” quince días, ya que hay que reconstruir uno de los dos túneles afectados.

Puente indicó que el Gobierno ha aprobado 13 millones de euros para restituir “con urgencia” la carretera A7, que recorre la costa del levante español y que se encuentra cortada e imposible de transitar.

“Ayer comenzaron las obras, no podemos ir más rápido”, dijo el ministro, quien remarcó que la situación es “tremendamente grave”, con 80 kilómetros de la red de carreteras del estado afectadas por el temporal.

La compañía Iberdrola, por su parte, restableció el suministro eléctrico al 90 % de las personas que se quedaron sin luz por las fuertes llluvias.

Por su parte, el ministerio español de Trabajo, encabezado por Yolanda Díaz, anunció que las empresas afectadas por el temporal pueden solicitar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por fuerza mayor, una herramienta que incorporó la última reforma laboral para situaciones catastróficas.

Estos ERTE permiten la suspensión temporal del contrato de trabajo o la reducción de la jornada de las personas trabajadoras, que pueden recibir protección por desempleo sin que se consuma la prestación.

Entretanto, empresas como Repsol han puesto a disposición de las autoridades desde los complejos industriales próximos a las zonas afectadas a equipos materiales (ambulancias, bombas de extracción de agua, generadores, camiones, grúas), así como profesionales de emergencias y rescate.

Además en las estaciones de servicio de Repsol, se está suministrando combustible de forma gratuita a los efectivos de los cuerpos de seguridad y emergencia, así como a Tragsa, empresa pública responsable de la reparación de infraestructuras.

Por su parte los transportistas se han organizado para ayudar de forma voluntaria en el traslado de productos de primera necesidad y en la retirada de vehículos en las zonas más dañadas.

La situación de emergencia permanece con unas inundaciones que han situado este episodio como una de las catástrofes naturales más graves y desgarradoras de la historia en España.