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Ejército israelí confirmó la muerte de un comandante de Hamás, tras un bombardeo en Líbano

Esta operación se da luego de que el gobierno de libanés presentará una propuesta para desescalar el conflicto con Israel.

(Líbano) EFE/EPA/ATEF SAFADI / ATEF SAFADI

Este viernes 9 de agosto, el Ejército de Israel confirmó la muerte del alto comandante de Hamás, Samer Mahmoud al Hajj, tras un bombardeo. El líder se encontraba en uno de los campos de refugiados más grandes del Líbano, a las afueras de la ciudad de Sidón.

Según indicaron las tropas israelíes, Mahmoud al Hajj era el “encargado de reclutar y entrenar terroristas para atacar el Estado de Israel”.

Este bombardeo se da momentos después de que el gobierno libanés presentará, por primera vez en diez meses, una propuesta para contener el conflicto con Israel.

En ese documento el gobierno se comprometió a reforzar la presencia de su Ejército en el sur de Gaza para que Hezbolá abandone esta frontera. Sin embargo, después de estos bombardeos la propuesta de paz se podría ver afectada.

Israel ataca nuevamente Jan Yunis, en el sur de Gaza

Este viernes, el Ejército israelí realizó una nueva ofensiva terrestre en el sur de la Franja de Gaza, un día después ordenar a los civiles abandonar Jan Yunis y de aceptar la reanudación de las negociaciones con Hamás.

Según informó el Ejército, “tras recibir información de inteligencia que indicaba la presencia de terroristas e infraestructura terrorista en el área de Jan Yunis (…) la 98 División de las Fuerzas de Defensa de Israel comenzó su actividad operativa en la zona”.

Las fuerzas israelíes bombardearon más de 30 objetivos, incluyendo superficies bajo tierra y lugares de almacenamientos de armas, “las tropas están participando en combates tanto en la superficie como bajo tierra para eliminar a los terroristas en el área mientras localizan y desmantelan armamento e infraestructura”, dice el comunicado.

Según la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), unas 200.000 personas fueron evacuadas de Jan Yunis entre el 22 y el 27 de julio durante la última incursión terrestre del Ejército israelí, que dejó gran parte de la localidad totalmente arrasada.