Hija de Rubén Alfonso Castañeda honra la memoria de un hombre dedicado a Caracol Radio

En la tarde del jueves 4 de julio, la familia de Rubén Alfonso Castañeda confirmó la muerte del reconocido productor y periodista de 6AM HOY por HOY de Caracol Radio, quien dedicó buena parte de su vida a cazar personajes y enaltecer el nombre de un oficio en esta cadena radial.

Tras sostener una férrea lucha contra un cáncer, que le fue detectado en febrero de este 2024, el histórico productor de Caracol Radio, que trabajó de la mano de Dario Arizmendi y Yamid Amat, falleció a sus 66 años en la Clínica Colombia, al norte de Bogotá, rodeado de su familia y amigos.

“Se nos fue hoy, sin irse, porque todo aquel que en las últimas cuatro o cinco décadas haya pasado por Caracol Radio lleva algo de Rubén Alfonso dentro, cerca del corazón. Adiós, con aplauso de pie para este gran personaje radial”, indicó Gustavo Gómez.

En 6AM HOY por HOY de Caracol Radio, su hija, Mariana Castañeda, honró la memoria de su padre recordando algunas de las anécdotas que demuestran su vocación y entrega por un oficio que desempeñó por más de 40 años, de la mano de grandes periodistas.

“Su trabajo fue su mayor anhelo. Su profesión la hizo con cariño. Recuerdo desde niña sus agendas que son oro, y que alguna vez de le perdieron en la casa y lloraba como un niño. Sabemos que hizo grandes cosas por la radio: ayudar a sus compañeros y estar de manera incondicional”, aseguró.

Mariana recordó que la agenda de contactos de su padre, por la que se rumora le ofrecieron considerables montos de dinero y por la que pasó uno de los sustos más grandes de su vida cuando se le perdió, estaba llena de números y contactos de las personalidades no solo más importantes del país, sino de otras partes del mundo.

“Desde el Vaticano en adelante. Desde los presidentes de cada uno de los países. Una agenda a lápiz con sus borradores. Son recuerdos de un hombre muy profesional”, reconoció Mariana.

Asimismo, recordó que durante buena parte de su vida se levantó a las 3:00 a.m., sin quejarse, para entrar a ese mundo de micrófonos, personajes e historias que lo apasionaba hasta la médula, en el que lo llamaban cariñosamente “el marranito”.

Por otra parte, aseguró que vivió sus últimos años “tranquilo y feliz” en La Vega, Cundinamarca, el pueblo que hoy lo honra y que lo vio nacer hace 66 años, jugando con sus amigos billar.

“Todo el tiempo estaba pensando en la noticia actual. A quién podía llamar, a quién conseguir. Además, que tenía buena relación con personas en la política y los medios. Era un tipo que se hacía amar”, aseguró Mariana Carreño.

Por último, recordó aquel hombre que llegaba después de extenuantes jornadas de trabajo, en medio de la cotidianidad de este convulso país, y se dedicaba a llamar a los personajes que al siguiente día darían la noticia en los micrófonos de Caracol Radio.