“Si me trasladan, le mato a la familia”, las escalofriantes amenazas contra Élmer Fernández
El asesinado director de la cárcel Modelo de Bogotá venía recibiendo amenazas, a pesar de que solo llevaba un mes y 10 días en el cargo
Las primeras hipótesis que estarían manejando las autoridades frente a este atentado señalan a ‘Pipe Tulúa’, quien comanda el grupo Mago (Muerte a Guardias Opresores). Este peligroso sicario Felipe Marín Silva, alias Pipe Tuluá, se le atribuyen 39 homicidios, y públicamente ha dicho que guardián que se atraviese en sus caprichos será asesinado.
El asesinado coronel Elmer Fernández había recibido unos panfletos por parte de un hombre que se identificó como ‘Pedro Pluma’.
Uno de esos panfletos decía: De parte de Pedro Pluma de cuarto A para el director que si se vuelve a meter de requisa para el patio le mato la familia.
En otro panfleto le decía: Para que vea que yo sí tengo poder y si me trasladan le mato a la familia. Este tiene fecha del pasado 9 de mayo.
El 9 de mayo se había presentado unos disturbios extraños a las afueras de la cárcel la Modelo y terminaron en disparos que terminaron impactando en una pared.
Según el INPEC, son cerca de 200 amenazas presentadas contra funcionarios de esta institución en lo que va de 2024.
Pese a estas amenazas de muerte, el hoy asesinado coronel Élmer Fernández no tenía protección ni la había solicitado a la Unidad Nacional de Protección.
El carro en el que se movilizaba no era blindado, por lo que fue más fácil para los sicarios llevar a cabo el atentado.
¿Qué gestión estaba realizando Élmer Fernández en el centro penitenciario?
El coronel Élmer Fernández llevaba un mes como director de la cárcel Modelo de Bogotá. Su labor principal era la lucha contra las extorsiones y para ello se enfocaba en impartir disciplina y hacer varias requisas sorpresa en varios patios problema. Estas purgas dentro del penal causaron molestias en algunos reclusos que eran amos y señores de la cárcel.
Esas requisas sorpresa llevaron a la incautación de varios celulares que eran usados para extorsionar y amenazar desde la cárcel y así seguir delinquiendo.
Incluso el director Fernández dio la orden de cambiar de patio a varios detenidos para aislar a las bandas que se estaban formando en la cárcel.
Esa gestión lo llevó a recibir varias amenazas y a ser declarado objetivo de algunos detenidos. Es la primera vez que asesinan a un director de una cárcel en el país.