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92 mil viviendas se han dejado de vender entre enero y septiembre de 2023: Camacol

La Cámara Colombiana de la Construcción informó que la pérdida de inversión en séctor residencial superó los 17 billones de pesos en septiembre.

Guillermo Herrera, presidente Camacol.

Barranquilla

En la inauguración del Congreso Colombiano de Construcción Camacol, el presidente de la Cámara, Guillermo Herrera, aseguró que el panorama para el sector es “severo”.

“La historia reciente de la construcción en Colombia, de la vivienda, es la historia de sus crisis. En los últimos 20 años, el sector ha salido al rescate de la economía en múltiples ocasiones: Para evitar la recesión durante la crisis financiera mundial de 2009, con la creación de la cobertura a la tasa de interés; con la implementación de los Planes de Impulso a la Productividad y el Empleo - PIPE en 2013 y 2015; los cuales dieron origen entre otros a Mi Casa Ya”, explicó Herrera.

Camacol presentó las últimas cifras de Coordenada Urbana de Camacol, con corte a septiembre. La Cámara informa que, entre enero y septiembre de 2023, se dejaron de vender 92 mil viviendas, de las cuales 73 mil fueron VIS. Para septiembre, la pérdida en inversión en el sector residencial superó los 17 billones de pesos.

Frente al desestimiento de compra de vivienda se presentó un crecimiento del 90% en lo corrido de 2023.

23 mil de los 30 mil hogares que han renunciado al sueño de comprar vivienda, renunciaron a una vivienda de interés social. En este segmento las renuncias crecieron un 135%, afectando a los hogares más vulnerables”, expresó el presidente Guillermo Herrera.

Desde Camacol piden que mejoren los niveles de asignación de subsidios que son los que permiten el cierre financiero para que las familias puedan comprar vivienda y no desistan.

“Para salir de esta coyuntura tan severa se deben atacar las razones que están generando la caída en las ventas que es la falta de cierre financiero de los hogares por el comportamiento de las tasas hipotecarias y eso ya está inventado, eso ya lo hemos probado en el país. Sabemos que se resuelve a través de programas como Mi Casa Ya, las coberturas a las tasas de interés, que deben asignarse con recursos suficientes para atender la demanda que viene en cola”, afirmó Herrera.

Desde el séctor de la construcción aseguran que es fundamental trabajar en tres puntos:

  • La construcción formal como condición necesaria para un ordenamiento del territorio que busque la protección de los recursos naturales, especialmente, en un escenario de crecimiento demográfico que debe ser atendido con vivienda formal y mejor infraestructura.
  • La vivienda es clave para garantizar la seguridad humana y la justicia social. Cinco (5) de los quince (15) indicadores que inciden en la pobreza multidimensional están asociados con la vivienda y el hábitat. El Plan de Desarrollo tiene como meta reducir el IPM del 16 al 9,5%. Esto implica que 3,6 millones de personas deben salir de la pobreza para 2026. Esto será posible con la vivienda como instrumento.
  • La construcción formal es también una condición necesaria para la convergencia regional, para reducir las brechas territoriales, sociales y económicas. Promover la oferta permitirá reducir el déficit habitacional del 31% al 26%, como lo propone el Gobierno Nacional.