Las escenas que se han viralizado en algunos lugares de los Estados Unidos, mostrando a personas que no pueden controlar sus movimientos y permanecen en las calles en un estado deplorable, generan preocupación, por los efectos y la expansión global del fentanilo, una droga que está cada vez más involucrada en muertes por sobredosis, de acuerdo con el CDC.

Colombia no se encuentra ajena a esta problemática internacional, puesto que en el país ya se han reportado los dos primeros casos de sobredosis, en Medellín, mostrando una preocupante situación frente al consumo de este tipo de drogas, las cuales se estarían usando en combinación con otros estupefacientes de uso local, como el ‘Tusi’.

De igual manera, en el país se realizó la primera extradición a EE. UU. por el tráfico de esta droga, al ciudadano Dabinsson Niño Meyer, quien fue acusado de distribuir grandes cantidades de fentanilo, principalmente en los estados de Pensilvania y Nueva York entre los años 2017 y 2019.

¿Cuál es el origen del fentanilo?

El fentanilo se desarrolló por primera vez en 1959 y en la década de 1960, comenzó a utilizarse como anestésico intravenoso, según reseña la DEA. En la actualidad se fabrica y distribuye legalmente en los Estados Unidos.

Como señala el CDC, este opiáceo sintético se emplea para el tratamiento del dolor intenso, habitualmente el dolor oncológico, es decir, relacionado con el cáncer. Es entre 50 y 100 veces más potente que la morfina y se prescribe en forma de parches transdérmicos o pastillas.

Este tipo de parches, señala la Clínica Mayo, solo se deben recetar en pacientes tolerantes a los opiáceos, únicamente, si ya se han empleado narcóticos orales.

Hasta la fecha, el fentanilo en Colombia es controlado por el Fondo Nacional de Estupefacientes y se usa con los mismos fines farmacológicos: disminuir el intenso dolor de los pacientes de cáncer.

¿Por qué el fentanilo es la droga más peligrosa del mundo?

Los datos recopilados por el Centro de Control y Prevención de Enfermedades, indican que el fentanilo y otros opioides sintéticos, “son las drogas más frecuentemente involucradas en las muertes por sobredosis”. Siendo mortal incluso en dosis pequeñas.

“Más de 150 personas mueren cada día por sobredosis relacionadas con opioides sintéticos como el fentanilo”, alerta el organismo estadounidense.

Además de ello, las autoridades norteamericanas reportan que la mayoría de los casos recientes de daños, sobredosis y muertes relacionados con el fentanilo en EE. UU. están vinculados a la fabricación ilegal.

Se vende en mercados de drogas ilegales por su efecto similar al de la heroína. “A menudo se mezcla con heroína y/o cocaína como producto combinado —con o sin conocimiento del consumidor— para aumentar sus efectos eufóricos”, reporta el instituto.

¿Cuál es el efecto del fentanilo en el cuerpo?

El fentanilo puede inyectarse, esnifarse, fumarse o tomarse por vía oral en pastillas o comprimidos. Se abusa de los parches de fentanilo extrayendo el contenido del gel e inyectándolo o ingiriéndolo. Hay reportes que sugieren que estos parches también se han congelado, cortados en trozos y colocados bajo la lengua o detrás de las mejillas.

Al igual que otros analgésicos opiáceos, como la morfina, produce efectos como relajación, euforia, alivio del dolor, sedación, confusión, somnolencia, mareos, náuseas, vómitos, retención urinaria, constricción pupilar, y depresión respiratoria, según la reseña de la DEA.

Los síntomas de la sobredosis pueden ir desde cambios en las pupilas, piel fría y húmeda y cianosis, hasta insuficiencias respiratorias, que pueden conducir a un estado de coma o a la muerte, advierte la Administración de Control de Drogas, DEA.

“Uno de los principales efectos son las alteraciones del estado neurológico, pierden el sentido de realizar sus actividades diarias, se dedican al consumo durante todo el día, también se presentan alteraciones musculares, por eso es llamada ‘droga zombi’, este es un medicamento que genera contracturas en el cuerpo”, según explicó Daniela Barrera, toxicóloga del hospital Erasmo Meoz.

Según National Institute on Drug Abuse, las personas adictas al fentanilo que dejan de consumirlo pueden experimentar varios síntomas de abstinencia que a veces comienzan apenas unas pocas horas después de haber consumido la droga por última vez. Estos síntomas incluyen:

• Dolores en músculos y huesos
• Problemas para dormir
• Diarrea y vómitos
• Escalofríos con “piel de gallina”
• Movimientos incontrolables de las piernas
• Deseos intensos de consumir la droga