Colombia sigue teniendo altos índices de concentración de tierra en manos de pocos
Esto se evidenció en la instalación de una mesa que abogará por una política pública rural entre organizaciones campesinas, instituciones del Estado y Gobierno Nacional.
Instalación de la 'Mesa de Impulso a la Política Pública Nacional para el Campesinado Colombiano' / Foto: Twitter @DefensoriaCol
Colombia
A pesar del Acuerdo de Paz, Colombia sigue teniendo altos índices de concentración de tierra en unos pocos, lo que coloca en una situación de vulnerabilidad a los campesinos del país.
Esa premisa salió luego de la instalación de la ‘Mesa de Impulso a la Política Pública Nacional para el Campesinado Colombiano’ convocada por la Defensoría del Pueblo en apoyo de los Ministerios del Interior y Agricultura, y en la que convergieron 24 organizaciones campesinas y 20 instituciones del Estado que participan en el sector rural.
Una de las soluciones a dicha problemática, es construir lazos entre todos los actores que están inmersos en políticas campesinas que brindes oportunidades y protección a los derechos del campesinado, mejorando su calidad de vida.
Pero la que más salió a relucir, es respetar, darle continuidad e implementar la reforma agraria y rural, que sobresale del documento del Acuerdo de Paz de La Habana de 2016. Ante esto y según datos de la Defensoría del Pueblo, los avances en la estructuración de lo pactado en el ‘punto 1′ resultan modestos comparados con las necesidades del campo.
La protección constitucional evidencia progresos, pero el índice de concentración de la tierra es de 0,89, uno de los más altos del mundo. Según el ‘coeficiente de Gini’ para la tierra en América Latina, y respaldado en cifras de la ong Oxfam International, la región alcanza un valor de 0,79, quizá arrastrada por la cifra desigual de Colombia, la que deja a América Latina por encime de Europa 0,57, África con 0,56 y Asia con 0,55.
Por último, el defensor Carlos Camargo, aseguró que “la construcción de la política pública para el campesinado debe contar con un enfoque de género, y en ese sentido: las mujeres rurales y campesinas deben ser actores fundamentales en la construcción de la misma”.
La instalación de esa mesa para la política pública rural y campesina, pretende igualmente exponer recomendaciones y prioridades para que el Gobierno Nacional, pueda elaborar un Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026, mucho más completo, específicamente temas como el acceso a la tierra, la productividad, territorialidad y restitución de tierras.