La joven de 24 años<strong> se convierte en la primera víctima de violencia contra la mujer del 2020</strong>. Familiares claman justicia.<strong>Nadie se alcanzó a imaginar que el amor de adolescencia, ese amor de vecinos</strong> que vivió Jessica Alexandra Gómez y José Yeris López,<strong> desencadenaría en la más triste y repudiable tragedia</strong> qu<strong>e enluta al departamento del Huila;</strong> en donde las cifras de violencia contra la mujer comienzan a enlistarse en este 2020 con la muerte de la joven de 24 años.La historia de una muerte anunciada, de una <strong>vida llena de maltratos y amenazas la conocimos por voz propia del padre de Jessica Alexandra,</strong> Lillamalde Gómez, quien se atrevió con la voz entrecortada a contar la historia del<strong> calvario que vivió su hija durante tantos años,</strong> esa misma que prefirió callar y que<strong> la llevó a morir por amor y temor a que algo le pasara a sus tres pequeños hijos</strong> de 8, 6 y 3 años de edad.<strong>La historia entre Jessica y José Yeris inició en la calles del barrio</strong> La Libertad en Tello, Huila, fueron los <strong>vecinos, amigos y allegados los testigos del inicio de un amor entre dos jóvenes inocentes</strong> que se enamoraron; pero jamás se imaginaron que tendría tan fatídico desenlace.Florentino Pastrana, es vecino de toda la vida de la familia Gómez y amigo cercano del padre, afirma que <strong>nunca si quiera imaginaron que la historia se contaría de esta forma,</strong> “ellos<strong> eran unos niños cuando empezaron la relación </strong><strong>en el colegio, en la calle.</strong> Siempre los veíamos juntos y luego de un tiempo <strong>se fueron a vivir juntos</strong>, se veían muy enamorados; pero llegó un tiempo en el que<strong> Jessica empezó a sufrir maltrato</strong> por parte del joven”.Esa misma versión la cuenta Lillamalde cuando dice que<strong> los maltratos no eran de ahora,</strong> o de hace tres meses cuando Jessica, <strong>cansada de los golpes, decidió irse a vivir junto con él y sus hermanos.</strong><strong>“Ella venía sufriendo maltrato, amenazas, él le decía que la iba a matar y que también mataría a los niños.</strong> Un día se entró a la casa y le rompió con unas tijeras toda la ropa, la dejó solo con la ropa que tenía. Hace un tiempo<strong> la cogió a la fuerza o tal vez la amenazó y se la llevó para una finca y allá le pegó una “muenda”,</strong> mi hija llegó a la casa con <strong>morados en la cara, los brazos y las piernas</strong> y fue cuando le dije que se viniera a vivir conmigo”. señalóLas<strong> amenazas de muerte contra Jessica Alexandra se cumplieron el pasado 31 de diciembre a las 3:40 de la madrugada,</strong> en su humilde casa ubicada en el barrio La Libertad, en Tello, norte del Huila, en ese mismo barrio donde vivieron el más hermoso idilio Jessica y José, donde actualmente solamente hay tristeza, dolor y rabia entre los vecinos porque <strong>Jessica no se lo merecía, dicen entre lágrimas quienes la conocieron.</strong><strong>“Ese hombre planeó todo, él fue a buscarle problema a uno de mis hijos esa noche; pero nadie se imaginó que iba a mirar donde dormía mi hija.</strong> Él tenía todo planeado, nos dicen que en la estación de gasolina del pueblo <strong>hay un video grabado del momento cuando fue y compró 2.000 de gasolina</strong> que le echo a mi hija sobre el cuerpo”, afirmó Lillamalde padre de Jessica.La madrugada del 31 de diciembre del 2019 fue fatídica para la familia Gómez, pues <strong>sus hermanos evidenciaron el momento,</strong> los vecinos se percataron de un fuerte sonido del cual nunca se imaginaron que Jessica era víctima.“Dos de mis hijos estaban durmiendo en la misma habitación con Jessica ese día, <strong>ellos escucharon y vieron a mi hija envuelta en llamas,</strong> se despertaron y con sábanas apagaron el fuego que estaba sobre ella y mi nieta”.De urgencias <strong>Jessica Alexandra fue trasladada al centro de salud del municipio donde recibió atención,</strong> pero que por la gravedad de las heridas de forma inmediata<strong> tuvo que ser remitida para el Hospital de Neiva.</strong><strong>“Mi hija estaba consiente la última vez que la vi,</strong> en el puesto de salud en Tello hablé con ella, y me dijo <<papi deme agua que tengo mucha sed>>, yo fui a darle agua y la enfermera me dijo que no podía darle nada, <strong>esas fueron las últimas palabras que escuché de mi hija</strong>”.<strong>Con quemaduras de segundo y tercer grado en el rostro, oídos, nariz y labios, además de torso, brazos y parte del abdomen</strong> Jessica fue ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Neiva, donde <strong>permaneció luchando por su vida cerca de tres días. A</strong>l igual que su pequeña de 3 años que resultó con quemaduras en el cuerpo de las que se recupera satisfactoriamente.<strong>El hecho ha generado repudio en el Departamento del Huila,</strong> la noticia de su <strong>fallecimiento se conoció este sábado</strong> hacia las 7:00 de la mañana, hora en la que la joven empezó a presentar <strong>saturaciones de oxígeno en su sangre tendientes a la baja.</strong>De acuerdo con Andrés Bahamón, médico del Hospital de Neiva, <strong>las causas del deceso fueron múltiples “la paciente presentó algunas complicaciones en su salud</strong> hacia las 6:00 de la mañana, a las 7:40 am. presentó un<strong> paro cardio respiratorio, hicimos todo lo medicamente posible,</strong> pero no respondió y finalmente murió”.Por su parte, Lina Marcela Castaño, personera del municipio de Tello, indicó que <strong>hizo falta acciones rápidas en la atención en el estado de salud de Jessica Alexandra,</strong> por lo cual se pronunció frente al caso.“El caso de Jessica era muy grave, su cuerpo estaba totalmente quemado y empezó a hincharse. <strong>Ella requería ser traslada de forma inmediata hacia Bogotá</strong> al pabellón de quemados del hospital Simón Bolívar; <strong>pero hubo mucha demora,</strong> realmente en este caso se evidencia la<strong> deshumanización de la salud en este país”.</strong><strong>Jessica Alexandra se convierte en la primera víctima de violencia del año 2020,</strong> mientras su familia llora su ausencia y sus tres pequeños a los que deja huérfanos deberán crecer para <strong>entender el por qué su padre por celos y posesión destruyó la vida de la mujer que decía amar.</strong><strong>La familia de Jessica Alexandra vive entre la tristeza y el miedo, porque José Yeris cumplió con las amenazas.</strong> Es por eso que piden a las autoridades que les brinde las <strong>garantías de seguridad que no le brindaron a Jessica,</strong> cuando cansada del maltrato decidió <strong>denunciarlo ante la Comisaria de Familia.</strong> Ahora la familia teme que las amenazas se hagan realidad para los hijos de Jessica, pues <strong>la justicia decidió dejar en libertad al agresor.</strong>Mientras tanto<strong> afuera del Hospital de Neiva permanecen el padre, hermanos y amigos de la familia,</strong> <strong>a la espera de que la pequeña hija de Jessica</strong> tras una notable mejoría pueda ser dada de alta, para que pueda con sus dos hermanos <strong>dar el último adiós a sus madre.</strong> Esa madre que llena de amor prefirió callar, soportar golpes y malos tratos, antes que atentaran contras sus vidas.Jessica Alexandra<strong> murió por amor o tal vez más por miedo de someter a sus hijos al mismo calvario, que ella</strong> durante años padeció.<strong>Se espera que este domingo el cuerpo de la mujer sea entregado a sus familiares,</strong> para luego ser trasladado hasta el municipio de Tello, al barrio La Libertad, donde un día fue feliz con el amor de su vida; ese mismo amor que la llevó a la muerte.