El mieloma múltiple, una enfermedad que necesita pronta atención
En 2019 se registraron alrededor de 2.578 casos de la enfermedad en el país. Aproximadamente 600 casos al año de mieloma múltiple son registrados.
Esta patología es un cáncer que ataca las células plasmáticas, estos son tipos de glóbulos blancos que se encuentran en la medula ósea. La enfermedad se forma en el instante en que las células afectadas crecen de manera incontrolable y se acumulan en las células plasmáticas sanas de la medula ósea.
A medida que las células cancerosas se multiplican, hay menos espacio en la médula ósea para las células sanguíneas normales, lo que resulta en una disminución del número de glóbulos rojos, blancos y plaquetas. Esto puede causar anemia, aumento de sangrado y aparición de moretones bajo nivel de plaquetas, escasez de glóbulos blancos para combatir infecciones, fracturas de los huesos, infecciones, daño renal, entre otros.
Durante el espacio ‘Hablar para Vivir’, moderado por Vanessa de la Torre, el médico Jheremy Reyes, especialista en medicina interna y hematología, afirmó que “no hay que tenerle miedo al estudio de la médula ósea, es un procedimiento sencillo. Muchas personas llegan con un dolor de espalda, hay que sospechar de la enfermedad, es una enfermedad sin restricción de edad, que puede darle a cualquier persona y en cualquier momento”.
Detección y síntomas
El mieloma múltiple es un tipo de cáncer difícil de detectar, pues sus síntomas pueden ser confundidos con otras enfermedades. En Colombia, el 68% de los casos recibió un diagnóstico incorrecto, y requirió aproximadamente de siete meses para detectar esta patología.
En 2019 se registraron alrededor de 2.578 casos de la enfermedad en el país. Aproximadamente 600 casos al año de mieloma múltiple son registrados.
Encontrar el cáncer cuando está en etapas iniciales a menudo permite la posibilidad de contar con más opciones de tratamiento.
Los síntomas que ocasiona son el dolor y debilidad en los huesos, anemia, deshidratación, perdida del apetito, entre otros.
Existen distintos tratamientos para la enfermedad, entre ellos la quimioterapia, corticoesteroides, agentes inmunomoduladores (inmunoterapia), inhibidores del proteosoma y anticuerpos monoclonales.