Iglesia llama a la unión para derrotar el hambre, la guerra y la pandemia

Bogotá

La humanidad vive momentos profundamente difíciles por la pandemia del coronavirus, que es uno de los tantos males que frecuentemente la azotan, y que se convierte en una prueba dura de la que solo se puede salir con la unidad y la solidaridad entre los pueblos. Es una de las conclusiones de siete Obispos y Sacerdotes de la Iglesia Católica de Colombia, en el tradicional Sermón de las 7 Palabras, emitido este Viernes Santo por las emisoras de Caracol Radio.

Es el momento de pensar en nosotros, pero también en los demás; tenemos que pedir perdón y debemos perdonar, dijo el arzobispo de Cali, monseñor Darío de Jesús Monsalve, y añadió que “solidaridad es la palabra que debe estar en cada uno de nosotros”.

En la Primera Palabra de Jesús en la Cruz, monseñor Monsalve también habló sobre la necesidad de fortalecer la paz, de abrir caminos al perdón y convocó a todos quienes estén en las armas, a manifestarse como seres humanos. Añadió que la vida está ahora amenazada no por nuestros odios, ni por las rencillas, sino por un enemigo común que ataca la vida de las personas y frente al cual debemos unirnos para salir adelante.

La unión para ganarle al hambre, a la guerra y a la pandemia, planteó el religioso, mientras que el obispo de Engativá, monseñor Francisco Nieto Súa, también llamaba a la solidaridad para ayudar en estas épocas de dolor a los más desprotegidos.

Monseñor Nieto oró por las miles de personas que sufren en el mundo al no poder ni siquiera despedir a sus seres queridos y expresarles su amor y reconocimiento por las acciones de sus vidas.

Pero destacó que en medio de la pandemia Jesucristo está muy presente. “Gracias, porque sigues apareciendo en medio de nosotros a través de tantas personas comprometidas y cercanas al dolor”, dijo en su oración el obispo de Engativá, en referencia a que el Señor está representando en cada médico, en cada enfermera, en cada trabajador de los servicios sanitarios y en cada hombre y mujer que trabaja en medio de la emergencia, para que la humanidad salga adelante.

Anotó que la Segunda Palabra, Hoy estarás conmigo en el paraíso, “es una invitación a que comprendamos que nosotros nos salvamos unidos los unos con los otros.

El papel de la mujer, su aporte a la sociedad en momentos tan convulsionados para la humanidad, pero también la reivindicación de sus derechos, fue el tema central del sacerdote eudista Carlos Panesso, quien desde Medellín envió el mensaje de la Tercera Palabra.

Recordó que en el pasado la mujer no tenía ningún poder de opinión ni decisión, pero supo sobreponerse y hoy está con su trabajo al servicio de la sociedad. Pidió respeto para las mujeres que aún sufren por la exclusión a las que son sometidas.

La Cuarta Palabra de Jesús en la Cruz, en Caracol Radio, fue pronunciada desde Boyacá por el sacerdote Víctor Manuel Leguízamo Díaz, ex secretario de Educación de Tunja, quien cuestionó la indiferencia, la falta de oportunidades, la corrupción y otros males que afectan a todos, pero particularmente a niños, jóvenes y ancianos.

El padre Leguízamo Díaz expresó que el camino no es alejarse de Dios, sino del pecado y hacer acciones para que en el mundo haya más equidad, justicia y esperanza para el futuro.

La Quinta Palabra fue emitida en Caracol Radio desde el municipio de Piedecuesta, Santander, por el padre Gabriel Mantilla, párroco de la Iglesia de San Rafael, quien llamó a proteger y ayudar a miles y miles de migrantes que hoy parecen no tener rumbo ni esperanza.

Dijo que la sed de Jesús es la sed de quienes van por hoy el mundo, los migrantes que caminan y caminan sin saber para dónde van ni que van, ni qué van a hacer cuando lleguen. El padre Mantilla lamentó que hoy los migrantes no solo carezcan de apoyo, sino que además sean mirados con indiferencia y, en no pocas ocasiones, con miedo.

Habló sobre quienes sufren en medio del rebusque, en busca de algún bocado para él y su familia, o los personas que hoy están encerrados, en medio de la pandemia, sin recibir ningún apoyo, o sobre los habitantes de la calle que no lo hacen por placer, sino porque es el único espacio que el mundo les brinda para que sobrevivan. A todos ellos hay que acogerlos, apoyarlos, ayudarlos a sanar, afirmó el padre Mantilla al apelar a la solidaridad para sacarlos adelante.

Desde la región Caribe se pronunció la Sexta Palabra con el padre Álvaro García Zapata, párroco de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, en el norte de Barranquilla, quien hizo una reflexión sobre la crisis que vive la humanidad y que ha sido generada por una cultura de muerte en la que la sociedad se ha movido durante muchos años.

Pero dijo que Dios es un ser de misericordia, que crea para salvar. Hoy lloramos cuando sepultamos a nuestros difuntos y nos sentimos con las manos amarradas, pero tenemos esperanza, tenemos dos ventajas, la fe y la suspicacia que hoy la ponemos al servicio del bien, y que nos permitirá salir adelante, valorando la solidaridad, el encuentro de familia, la oración, anotó el padre García Zapata.

La Séptima Palabra en Caracol Radio fue un homenaje a Popayán, la Ciudad Blanca, la capital religiosa de Colombia. La reflexión sobre esta última palabra de Jesús en la cruz la hizo el arzobispo de esta ciudad, monseñor Luis José Rueda Aparicio, quien envió un mensaje de esperanza en medio de la convulsión que envuelve a la humanidad.

El mundo se está poniendo a prueba, hoy mira el rostro del Padre, camina en medio del miedo, del aislamiento, en busca de respuestas y soluciones, dijo monseñor Rueda Aparicio, pero apuntó que en medio de este drama hay una semilla de esperanza que está creciendo entre la humanidad.

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