Programas de educación ambiental: de lo presencial a lo virtual
El rol de las comunidades sobre el cuidado del medio ambiente
Frecuentemene los usuarios de redes sociales publican ‘selfies’, acontecimientos importantes o fotos del apetitoso plato que están a punto de comer. Pero basta con darles una mirada a los perfiles de Rosa María Salas, Kelly Acevedo y Sandra Cano para notar la conciencia ambiental que demuestran en Facebook con mensajes que inspiran a otros a cuidar el planeta.
Rosa, Kelly y Sandra hacen parte de los Proyectos Ciudadanos de Educación Ambiental -PROCEDA que, desde hace al menos cinco años y cuando el mundo vivía sin pandemia, Cerro Matoso adelanta con las familias de las comunidades vecinas a su operación, directamente en sus asentamientos y con la biodiversidad de Córdoba como telón de fondo.
En 2021, tan pronto entraron a regir las medidas preventivas decretadas por el Gobierno, el equipo encargado de la formación de PROCEDA, en conjunto con las comunidades, comenzó a pensar en opciones. “Identificamos alternativas para dar continuidad al proyecto de educación ambiental comunitario que veníamos desarrollando de manera presencial y encontramos en Facebook la herramienta para seguir estrechando lazos y sembrando conocimientos en las comunidades y que estas a su vez lo aplicaran desde sus casas en pro del medio ambiente”, afirmó María Eugenia Quiroga, líder de Ambiente de Cerro Matoso.
Esto parece muy sencillo pero, teniendo en cuenta las limitaciones de conectividad que existen en el entorno rural, donde las personas deben ubicarse en un punto específico de la comunidad donde exista señal para hacer una llamada o conectarse a una clase, tiene aún más mérito.
Al principio, pasar del ambiente natural con aire puro a la pantalla del computador o del celular significó un gran cambio, tanto para los formadores como para los participantes pero, con el tiempo, todos se fueron adaptando, dándose cuenta de las ventajas que ofrece la tecnología.
El rol de las comunidades sobre el cuidado del medio ambiente
Actualmente PROCEDA está integrado por 70 participantes, miembros de las organizaciones de base del área de influencia de Cerro Matoso, distribuidas en los corregimientos de Pueblo Flecha, Bocas de Uré, Puerto Colombia, Torno Rojo, Centro América y en las veredas de Puente Uré y La Odisea, en San José de Uré y Puerto Libertador.
El cambio de método despertó la curiosidad de los participantes por contar la realidad ambiental desde su propia mirada, produciendo contenidos de diversa índole. Por ejemplo, el sabedor ambiental Farli Arrieta, de Bocas de Uré, creó un video relacionado con la biodiversidad de los ríos Uré y San Jorge, que pasan por su comunidad.
Con esta iniciativa y de la mano de la tecnología, Cerro Matoso ha logrado que las comunidades reflexionen sobre el cuidado del medio ambiente, el trabajo en equipo, el autoaprendizaje como herramienta transformadora y el intercambio de experiencias con otras comunidades.
Hoy Rosa María, de la comunidad de Puente Uré, afirma: “gracias al trabajo conjunto con Cerro Matoso, la llama de la educación ambiental no se apagó y le ha permitido a la comunidad seguir aprendiendo y aplicando sus conocimientos para cuidar el medio ambiente, aún en medio de esta situación de pandemia”.
“La estrategia que ha utilizado Cerro Matoso junto con el PROCEDA, ha sido exitosa. Si bien no nos podemos reunir de manera presencial para hacer las actividades, podemos reunirnos de manera virtual”, asegura Kelly Acevedo de Puerto Colombia.
“Hemos seguido trabajando por nuestro medio ambiente desde casa. Hemos hecho actividades con otros compañeros y hemos conocido las problemáticas que tienen otras comunidades a través de la tecnología. Para mí ha sido una experiencia muy buena trabajar en este grupo”, expresa Yalidis Gil, de Centroamérica.
Sandra Cano, de Torno Rojo, comenta: “hemos fortalecido la educación ambiental, sí se puede trabajar en nuestras casas, sí se puede seguir adelante con una buena educación ambiental, motivando a las personas. Estamos con toda la actitud positiva, y me siento muy contenta porque hemos obtenido un buen conocimiento acerca de cómo cuidar del ambiente y de nuestro planeta tierra y lo más importante es que he tenido la oportunidad de compartir todo el conocimiento obtenido con mi comunidad”.
Córdoba es uno de los departamentos más ricos y biodiversos de Colombia; cuenta con sabanas, bosque húmedo nublado y tropical, hasta manglares al nivel del mar, fuentes hídricas importantes como los ríos Sinú y San Jorge y ecosistemas de páramos, que facilitan la preservación de la vida. Este patrimonio nacional durante años ha acogido a muchas comunidades y les ha brindado con sus recursos, un sustento para su desarrollo económico, social y cultural.
Por medio de los Proyectos Ambientales Escolares -PRAE- y los PROCEDA, las personas pueden gestionar campañas de educación ambiental, eventos masivos, charlas y jornadas de recuperación y embellecimiento de zonas de interés comunitario y ambiental, con el apoyo y acompañamiento técnico de Cerro Matoso que los respalda y capacita para que cada acción cumpla su objetivo y genere conciencia entre la comunidad cordobesa.
Cerro Matoso es una empresa comprometida con las comunidades y el ambiente, por ello siempre busca soluciones y herramientas que logren romper las brechas sociales y físicas, con el fin de seguir generando valor, progreso y desarrollo. Su Programa de Educación Ambiental es una de las iniciativas creadas por la compañía para darles herramientas a las comunidades y que sean ellas quienes construyan su propio camino al desarrollo y la sostenibilidad a través de la autogestión y el autoaprendizaje.
PRAE y PROCEDA por el ambiente
Cerro Matoso, mediante un equipo especializado, y las comunidades trabajan conjuntamente en los Proyectos Ambientales Escolares (PRAE) y los Proyectos Ciudadanos de Educación Ambiental (PROCEDA), cumpliendo los lineamientos de la Política Nacional de Educación Ambiental.
Los PRAE vinculan la problemática ambiental cordobesa a los programas de las instituciones educativas y están liderados por los docentes. Los PROCEDA capacitan a promotores ambientales comunitarios en manejo de residuos sólidos, agua, cambio climático y biodiversidad quienes, además de multiplicar en la comunidad este conocimiento, deben autogestionar iniciativas con los gobiernos locales, instituciones y empresas de la región para mitigar los problemas ambientales concretos en su contexto.