Tres vigilantes resultaron heridos en ataque con explosivos en mina de Buriticá, Antioquia
Según el gobernador de Antioquia, el ataque tendría como objetivo tomarse la subestación eléctrica principal de la mina.
Mina en Buriticá, Antioquia. Foto: Cortesía.
Buriticá, Antioquia
La disputa por el control de la mina subterránea más grande del país, ubicada en el municipio de Buriticá, occidente de Antioquia, sigue enfrentando hechos de violencia pese a los recientes operativos de las autoridades.
En las últimas horas, tres guardas de seguridad resultaron heridos tras un ataque con explosivos en el sector conocido como Higabra, en inmediaciones del proyecto minero operado legalmente por la empresa Zijin Mining.
El atentado, según dio a conocer el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, tenía como objetivo tomarse la subestación eléctrica principal de la mina, infraestructura clave para la operación de la empresa. Los heridos fueron trasladados de urgencia para recibir atención médica, pues las esquirlas de los explosivos les causaron heridas, principalmente en sus rostros.
“Estamos tratando con los peores delincuentes, no con angelitos. A estos bandidos hay que combatirlos con todas las capacidades de nuestras Fuerzas y de la ley”, expresó el mandatario departamental a través de su cuenta en la red social X.
Ante esta grave situación, la Unidad Nacional Contra la Minería Ilegal (UNIMIL) de la Policía Nacional se desplazó a la zona para recuperar el control del tramo afectado y garantizar la continuidad de las labores legales de explotación de minerales.
Disputa por minería ilegal
La tensión en Buriticá no es nueva, la mina ha sido escenario de una guerra subterránea en la que se han utilizado cilindros bomba, mercurio, armas de largo alcance y explosivos, no solo contra el personal de la empresa sino también contra la fuerza pública.
En esta ocasión, según la información oficial, los responsables serían integrantes de estructuras de delincuencia común organizada que invadieron los túneles para intentar tomarse los niveles 1140 y 1125, donde se encuentran puntos neurálgicos como la subestación eléctrica.
El constante asedio de los grupos armados ilegales ha llevado incluso a la empresa Zijin Mining a anunciar acciones legales internacionales contra el Estado colombiano, al considerar que no se han garantizado las condiciones de seguridad necesarias para su operación.