Terminó la polémica. No habrá cobro del servicio de parqueadero en escenarios deportivos de Ibagué

Ibagué

Tras la polémica que se generó en la ciudad por el proyecto de cobro del servicio de parqueadero en el Parque Deportivo y la Unidad Deportiva de la calle 42, la alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda tomó la decisión de liquidar de forma bilateral el contrato de concesión suscrito por el Instituto Municipal para la Recreación y el Deporte IMDRI.

La solicitud elevada por la comunidad, especialmente de deportistas, entrenadores y directivos de clubes y ligas, permitió evaluar distintos aspectos que podrían afectar el normal desarrollo de la práctica deportiva y recreativa en estos lugares que hoy son un punto de encuentro para los ibaguereños.

“Quiero recordarles que esto lo hacemos poniéndonos al lado del deporte, entendiendo que estos escenarios deben estar al servicio de quienes los necesitan”, dijo Aranda.

Previamente, la mandataria local se había comprometido en generar soluciones inmediatas sin que esto afectara a corto plazo a las familias ibaguereñas que con esfuerzo ven en el deporte un estilo de vida.

“En este momento ya se encuentra en la plataforma Secop II la liquidación del contrato; realizamos varias mesas para encontrar soluciones y no afectar a la comunidad deportiva”, manifestó Felipe La Rota, gerente del Imdri.

Es de destacar que, a la fecha, no se ha cobrado por el servicio de parqueo en las instalaciones del Parque Deportivo y de la Unidad de la calle 42.

Las críticas a este proyecto

Una vez se conoció la iniciativa de cobrar el servicio de parqueadero en estos dos escenarios deportivos se desató una polémica especialmente por las condiciones que no serían favorables para el municipio.

Según la denuncia del concejal Jorge Bolívar el acuerdo entre el IMDRI y la firma que operaría la concesión establecía que el Instituto recibiría apenas un 20% del recaudo eso sí luego de descontar los gastos operativos que implicaba el funcionamiento del parqueadero.

Para Bolívar eran unas condiciones desventajosas para el municipio además que generaba un obstáculo para que los ibaguereños y sus familias pudieran acceder a espacios para la práctica del deporte y uso adecuado del tiempo libre.

En esa misma línea se pronunciaron otros concejales de la ciudad que consideraron que esta iniciativa golpeaba el bolsillo de los ibaguereños.