Concejales de Tunja expresan profunda preocupación por el proceso de actualización catastral

Tunja

Cinco concejales de Tunja han alzado la voz de alarma sobre el proceso de actualización catastral que implica un contrato por 10,000 millones de pesos, generando inquietud en el Concejo Municipal y entre la ciudadanía. La principal preocupación radica en la adjudicación del contrato a una empresa externa, cuando, según los concejales, la ciudad podría contar con un sistema catastral propio, lo que les permitiría ahorrar recursos públicos y garantizar un proceso más transparente.

A través de un derecho de petición dirigido al alcalde Mikhail Krasnov, los concejales, entre ellos Javier Mesa, Simón Parra, Edwin Rodríguez, Román Quintero y Julián López, expresaron su desconfianza respecto a la falta de claridad en el proceso de contratación y pidieron explicaciones sobre los motivos que justifican la elección de una empresa externa para realizar la actualización catastral. “Nos preocupa que, en lugar de utilizar un gestor catastral propio que podría ser más eficiente y económico, se esté contratando a una empresa externa. Esto genera muchas dudas, especialmente porque la asignación del contrato ha sido casi automática y sin una explicación detallada”, comentó López en una entrevista en Caracol Radio.

Impacto en los recursos de la ciudad

Los concejales han solicitado a la administración municipal una explicación detallada sobre la gestión de los recursos involucrados en el proceso, destacando la gran suma de dinero que se está invirtiendo en la actualización catastral. “10,000 millones de pesos es una cantidad significativa, y no sabemos si la actualización catastral realmente justificará este gasto. Necesitamos entender cómo se gestionarán estos recursos y si este proceso beneficiará realmente a la ciudad a largo plazo”, dijo López.

La actualización catastral es un proceso clave para la ciudad, ya que se realiza cada cinco años y tiene un impacto directo en los impuestos que los ciudadanos deben pagar, principalmente a través del impuesto predial. Sin embargo, los concejales temen que la asignación de un contrato de tal magnitud sin una justificación clara pueda generar un mal manejo de los recursos públicos.

Falta de transparencia

Además de la preocupación por el proceso de contratación, los concejales también han manifestado su malestar por la falta de transparencia y comunicación de la administración municipal. López explicó que, como concejales, se sienten aislados y sin información clara sobre los proyectos que se están ejecutando en la ciudad. “La administración actual no está brindando la información suficiente sobre los proyectos, y nos parece que hay una desconexión total entre la Alcaldía y el Concejo. No sabemos cuáles son los planes concretos para el desarrollo de la ciudad, ni cómo se están tomando las decisiones más importantes”, afirmó el concejal.

La falta de comunicación también se extiende a los medios de comunicación, que según los concejales, no tienen acceso a información relevante sobre el trabajo del gobierno local. “Los medios de comunicación serios que realmente se preocupan por el bienestar de Tunja no tienen comunicación con el alcalde, y eso es un problema serio. La ciudadanía merece saber qué está pasando y cómo se están tomando las decisiones que afectan su día a día”, agregó López.

Tunja sin rumbo claro

Otro tema que ha generado preocupación entre los concejales es la falta de liderazgo en la administración municipal. Según López, Tunja parece estar “sin rumbo claro”, y los proyectos importantes para la ciudad están estancados. “Tunja se ha convertido en una ciudad acéfala. No hay un norte claro, no vemos ninguna estrategia concreta para el desarrollo de la ciudad. Si seguimos así, no avanzaremos”, expresó López, señalando que la falta de coordinación y visión a largo plazo es uno de los mayores desafíos que enfrenta la capital boyacense.

Este sentimiento de incertidumbre se refleja también en la crítica hacia el trabajo de la administración municipal en general. Los concejales consideran que el alcalde Mikhail Krasnov no ha logrado generar confianza ni conectar con los ciudadanos, lo que ha generado un clima de descontento. “No se está viendo una gestión eficaz, no se perciben avances significativos en proyectos fundamentales para la ciudad. La administración está desconectada de las necesidades reales de los ciudadanos”, concluyó López.