Amnistía Internacional pide investigar a altos mandos por muertes en protestas de Perú
Amnistía Internacional (AI) ha instado a la Fiscalía de Perú a investigar a los altos mandos militares y policiales por su presunta responsabilidad en las muertes durante las protestas antigubernamentales de 2022 y 2023,
Perú
Este jueves, Amnistía Internacional (AI) presentó un informe en el que denuncia que altos mandos militares y policiales de Perú emitieron órdenes “letales” durante las protestas que sacudieron el país desde diciembre de 2022 hasta principios de 2023. El informe destaca que, a pesar de que los manifestantes fueron etiquetados como “fuerzas adversas” y “grupos hostiles” sin pruebas de vinculación con el terrorismo, las fuerzas de seguridad respondieron de manera violenta.
La investigación de AI revela que, en la operación del 15 de diciembre de 2022 en Ayacucho, se dispararon más de 1.200 balas en un solo día debido a órdenes verbales de mandos del Ejército. La organización también critica la decisión de la Policía Nacional del Perú (PNP) de desplegar fuerzas élites entrenadas para el uso de armas letales, lo que permitió el uso continuo de la fuerza letal durante meses.
AI subraya que, aunque los fiscales han identificado a varios policías y militares como sospechosos, las investigaciones han pasado por alto a los altos mandos, quienes, según el informe, deben ser investigados para garantizar justicia. La organización también señala que la presidenta Dina Boluarte ascendió al general policial responsable de los planes operativos letales, a pesar de las violaciones documentadas de la legislación peruana y del derecho internacional de los derechos humanos.
La presidenta Boluarte, en un contexto de creciente presión, ha sido criticada por su falta de acción frente a la violencia durante las protestas. Yovana Mendoza Huarancca, presidenta de la Asociación de Familiares de Asesinados y Heridos del 15 de diciembre y hermana de uno de los fallecidos, manifestó su descontento, señalando: “Los soldados no dispararon porque les dio la gana, recibieron órdenes y la presidenta pudo haber frenado todo esto, no le ha interesado.”
El informe de AI también destaca que los planes operativos dejaron en claro que los superiores en la cadena de mando estaban constantemente informados de los eventos letales, cuestionando la falta de responsabilidad de los altos mandos y la posible complicidad de las autoridades en el uso excesivo de la fuerza.