El Ejército de Israel identificó este lunes el lanzamiento de una treintena de cohetes desde el sur del Líbano hacia los Altos del Golán, después de confirmar que había matado a un alto cargo del grupo libanés Hizbulá en un ataque aéreo horas antes.
El comunicado del Ejército señaló que “los proyectiles cayeron en zonas despobladas”, además señaló que, horas antes, el sistema de defensa aérea interceptó un dron cargado de explosivos que se infiltró en territorio israelí desde Líbano, en la zona de Keren Naftali, mientras que otro cayó en el área de Metula. “No se reportaron heridos en ninguno de los incidentes”, agregó el Ejército.
Por su parte, Hizbulá se atribuyó la autoría de al menos siete ataques hacia Israel, el último de ellos hacia “posiciones de artillería del enemigo en Zaoura con decenas de cohetes Katyusha”, pero también varios con drones. Antes, el Ejército israelí había confirmado que había matado en un ataque aéreo en la zona de Tiro, sur de Líbano, a un alto cargo de Hizbulá, Ali Husein Sabra, de la unidad de aumento de fuerzas de la milicia chií, quien “participó en los esfuerzos para equipar y mejorar la unidad de defensa aérea de Hizbulá”.
Además, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) atacaron la infraestructura de Hizbulá en Qotrani y en Hanine, en el sur del Líbano. Al menos dos personas murieron este lunes y una tercera resultó herida por sendos bombardeos de drones israelíes contra un coche y una motocicleta que viajaban por dos áreas diferentes del sur del Líbano, informó la Agencia Nacional de Noticias (ANN).
Por un lado, un dron israelí disparó cuatro misiles contra un vehículo entre las localidades de El Kharayeb, Al Zararia y Kawthariya, donde falleció una persona; y un segundo ataque con un dron alcanzó una motocicleta en la ciudad de Naqoura, causando la muerte de una persona. Y el Ejército también dijo haber atacado a un “terrorista de Hizbulá” que operaba en Naqoura, sin confirmar su nombre, mientras que el grupo chií confirmó la muerte de su combatiente Husein Ahmad Nasser El Din, pero sin aclarar dónde, cuándo ni en qué circunstancias.
La frontera entre Israel y Líbano vive su mayor pico de tensión desde 2006 con un intenso intercambio de fuego desde octubre, que se ha cobrado la vida de casi 440 personas, la mayoría en el lado libanés y en las filas de Hizbulá, que ha confirmado unas 300 bajas de milicianos, algunas en Siria. En Israel han muerto 23 personas en el norte (13 militares y 10 civiles).
