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Aún no hay solución a la vista frente a la escasez de medicamentos que se registra en Colombia

Esta situación está poniendo en riesgo la salud y la vida de pacientes que padecen enfermedades como hipertensión, cáncer y trastornos mentales

Autoridades de salud reportan escasez de medicamentos / Caracol Radio

La escasez de medicamentos en el sistema de salud colombiano está poniendo en riesgo la salud y la vida de pacientes que padecen enfermedades como hipertensión, cáncer y trastornos mentales.

Es un problema que no tiene una única causa, sino que está relacionado con temas como la gestión de la cadena de suministro hasta aspectos financieros y regulatorios.

Para Enrique Peñaloza, profesor del Instituto de Salud Pública de la Pontificia Universidad Javeriana, la falta de medicamentos puede llevar a la descompensación de los pacientes, complicando su tratamiento y provocando una pérdida de adherencia al mismo.

Y Paul Rodríguez, profesor de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario y experto en economía de la salud, destaca que este fenómeno no es exclusivo de Colombia, sino que afecta a otros países como Estados Unidos.

Incluso tiene que ver con el diseño del mercado global de medicamentos, donde países como India y China dominaron la producción de principios activos a precios bajos, generando dificultades en la cadena de suministro a nivel mundial.

1. Lentitud en trámites del Invima

La lentitud en los trámites de aprobación de medicamentos por parte del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) es uno de los factores que influye en la escasez de medicamentos. La falta de un director en propiedad pudo haber contribuido a este problema, aunque históricamente el Invima ha enfrentado dificultades en la agilización de los procesos.

“Un factor tiene que ver con el registro de los medicamentos, lo que tiene que ver con el Invima. Entonces, el Invima ha estado lento frente a la autorización de nuevos ingresos de medicamentos o frente a la actualización de los registros que ya existen. Eso puede ser un tema que impida el ingreso de medicamentos”, afirmó Peñaloza.

La designación del nuevo director del Invima podría mejorar la eficiencia y agilidad en los procesos de aprobación de medicamentos, siempre y cuando desde la cabeza de la entidad se tomen medidas para acelerar los trámites.

Rodríguez sugiere establecer un plan de contingencia coordinado entre asociaciones médicas y el Invima para sugerir tratamientos alternativos en casos de escasez, basados en la evidencia clínica disponible. Destacó la importancia de una rápida difusión de información por parte del gobierno y la coordinación entre las diferentes instituciones de salud y asociaciones clínicas.

2. Necesidad de ampliar recursos

La escasez de liquidez en algunas EPS y hospitales generó retrasos en los pagos a proveedores de medicamentos. Esto afecta al canal institucional donde los medicamentos destinados a pacientes asegurados no se entregan debido a la falta de pago, mientras que dichos medicamentos pueden estar disponibles en el mercado para aquellos que pueden comprarlos directamente.

Peñaloza afirmó que la desconfianza en el flujo de recursos del sistema de salud puede llevar a situaciones como la suspensión del suministro de medicamentos debido a deudas pendientes, como fue el caso entre Cruz Verde y Sanitas.

“Esa discusión del flujo se volvió un tema relevante, sobre todo para los medicamentos que van por la vía institucional, porque los medicamentos que van por la vía comercial podrían no tener ese tipo de afectación porque se van directamente a las farmacias para que la gente los compre, pero eso implicaría un gasto de bolsillo mayor para los usuarios”, agregó Peñaloza.

Es fundamental que el gobierno garantice la liquidez necesaria en el sistema de salud para que las EPS y los hospitales puedan cumplir con sus obligaciones financieras. Esto implica proporcionar fondos suficientes para el pago oportuno a los proveedores de medicamentos, asegurando un flujo constante de suministros para los pacientes.

“La solución tiene que ver con tener una mejora frente a lo que es el flujo de los recursos. La suficiencia de la unidad de pago por capitación es un elemento crítico frente a lo que es poder normalizar el flujo de los medicamentos”, agregó Peñaloza.

3. Precisión y claridad en la actualización de precios

El control de precios de ciertos medicamentos puede estar contribuyendo a la escasez al no reflejar los cambios en los costos de producción y las condiciones del mercado. Los precios fijados en el pasado pueden resultar insostenibles para los fabricantes, lo que puede llevar a una reducción en la disponibilidad de medicamentos.

Según los datos abiertos suministrados por el Ministerio de Salud y Protección Social, la última actualización de estos precios se hizo el 20 de noviembre de 2023. No obstante, los datos se exponen de manera desorganizada y poco legible, por lo que es complejo que los ciudadanos puedan acceder a esta información de manera directa y concreta.

Finalmente, si este es un problema que está afectando el suministro, el gobierno debe revisar periódicamente los precios de los medicamentos sujetos a control para garantizar que reflejen adecuadamente los costos actuales. Si es necesario, se deben realizar ajustes para asegurar la viabilidad económica de los fabricantes y mantener un suministro estable de medicamentos en el mercado.