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Unibac y Escuelas Salesianas renovaron convenios para promover desarrollo académico

Estudiantes de Bellas Artes podrán realizar las prácticas sociales de 120 horas como requisito para graduarse.

Unibac

Cartagena

En la calle de las Bóvedas del barrio San Diego, en el Centro Histórico de Cartagena de Indias, hay dos instituciones de gran renombre educativo, Unibac y Escuelas Profesionales Salesianas, que son ejemplo de buena vecindad para afianzar una fructífera alianza académica.

Las entidades acaban de renovar acuerdos que, entre otras ventajas, permite a estudiantes de Unibac realizar en las Escuelas Salesianas las prácticas sociales de 120 horas como requisito para graduarse.

Las partes ratificaron los convenios suscritos para fortalecer la colaboración y promover el desarrollo académico, investigativo, de proyección y bienestar, expresando la voluntad de establecer una colaboración mutua para promover el apoyo académico y logístico entre estudiantes y docentes.

La ratificación se concretó en una reunión encabezada por Estela Barreto, vicerrectora académica de Unibac, y el hermano Juan Carlos Echavarría Zúñiga, rector de las Escuelas Profesionales Salesianas, en la que estuvieron presentes Edgar Ferrer Fortich, coordinador de Alianza de las Escuelas Profesionales Salesianas; Mónica Manosalva González, subdirectora Académica de Unibac; Angélica Fortich, directora de Proyección Social; Juvenal Miranda Moreno, director del Programa de Diseño Industrial, y Elda Peñaranda, de la Oficina de Prácticas Profesionales de Unibac.

Las Escuelas y Unibac se comprometen a coordinar acciones que permitan optimizar el uso de recursos, incluyendo el intercambio de experiencias pedagógicas, la planificación conjunta de actividades académicas y la realización de proyectos interdisciplinarios.

Ambas partes acuerdan explorar y desarrollar estrategias que faciliten la adaptación de los planes de estudio a las necesidades y demandas del entorno educativo actual, fomentando la innovación y la creatividad en el proceso de enseñanza-aprendizaje, la flexibilización curricular, el intercambio de conocimientos y recursos humanos.

Se establecerá un plan previamente concertado para el uso compartido de espacios e instalaciones, acceso a laboratorios, ambientes de formación técnica, talleres, bibliotecas, escenarios deportivos y otras instalaciones que beneficien a ambas comunidades siempre y cuando sea factible y beneficioso para las partes, con el fin de enriquecer la experiencia educativa de los estudiantes y promover la colaboración, fomentando el intercambio de conocimientos y experiencias.

Se fomentará además la colaboración en la organización y participación en eventos académicos, artísticos y culturales. Ambas instituciones buscarán oportunidades para la realización de actividades conjuntas, como conferencias, exposiciones, talleres y otras iniciativas que promuevan el enriquecimiento académico y cultural.