´De origen colombiano´: la apuesta del Gobierno para fortalecer el comercio artesanal

Este martes, 5 de diciembre, la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) y Artesanías de Colombia llevaron a cabo un evento en la Catedral de Sal de Zipaquirá para lanzar un proyecto que apuesta por proteger el trabajo de los artesanos en Colombia. ‘De origen colombiano’ es un programa que tiene como objetivo potenciar la comercialización de productos nacionales hechos por los colombianos.

Durante la jornada estuvieron presentes la superintendente, María del Socorro Pimienta Corbacho, la gerente de Artesanías de Colombia, Adriana Mejía, el viceministro de Comercio, Industria y Turismo, Arturo Bravo, emprendedores, artesanos, entre otras figuras y autoridades locales. Allí, el protagonismo se lo llevaron los creadores de 12 piezas originadas en el territorio nacional.

La estrategia comercial consiste en darle un valor agregado a los productos de los artesanos para que compitan frente a las grandes industrias extranjeras que producen imitaciones de los productos colombianos, pero a un precio más bajo. Pimienta explicó que “en un mundo donde la producción en masa domina los mercados, los artesanos, los creadores y los inventores deben enfrentarse a desafíos significativos para competir. A pesar de la calidad excepcional de sus productos, la vulnerabilidad aumenta”.

La superintendente añadió que “es crucial destacar la importancia de los signos distintivos en este escenario, siendo estos elementos fundamentales para comunicar la propuesta de valor, identidad, propósito y características únicas de los productos que ofrecen”.

Por otro lado, Mejía destacó los beneficios que tendrán los artesanos a partir de esta estrategia. “El proceso de denominación de marca, su costo, que pasa de los dos millones de pesos, ahora les cuesta 78.000 pesos al artesano y a la artesana, gracias a un acuerdo entre la Superintendencia de Industria y Comercio y Artesanías de Colombia”.

Es importante resaltar que para obtener la marca diferencial de productos nacionales, el artesano tiene que solicitar la Denominación de Origen (DO), la cual consiste en darle un aval de originalidad a un producto “cuya calidad, reputación u otras características se deban exclusiva o esencialmente al medio geográfico en el cual se produce, incluidos los factores naturales y humanos”.

Según Pimienta, “lo que promocionamos es la originalidad, por ello, el sello de Denominación de Origen sobre un producto garantiza calidad, originalidad, que tiene las características que dice tener, razón por la que el consumidor tiene la confianza de adquirirlo al precio correspondiente y justo. Actualmente, 29 productos cuentan con el sello de Denominación de Origen en Colombia”.