SOS por las comunidades indígenas de Colombia
La Corte Constitucional escuchó a pueblos indígenas quienes alertaron y pidieron ayudas urgentes.
La Corte Constitucional escuchó a pueblos indígenas quienes alertaron y pidieron ayudas urgentes.
Bogotá
El panorama que viven actualmente los pueblos indígenas es preocupante, niños, mujeres, familias enteras viven el desplazamiento forzado, hambrunas, falta de agua potable, no tienen educación de calidad, sufren de violaciones constantes, las guerras, además que sufren día a día la desculturización.
Precisamente sobre esto fue la audiencia pública realizada en la Corte Constitucional y no ha sido la primera, pues desde el año 2009, en el mandato de Álvaro Uribe Vélez, se ha tratado de identificar las problemáticas de estos pueblos y buscando soluciones, pero han sido nulas.
Yajira González, ella es representante del pueblo indígena Hiu, que tiene el mayor número de habitantes indígenas del departamento del Guaviare y en la actualidad están distribuidos en ocho asentamientos a lo largo del río Guaviare.
Lo que contó Yajira es impresionante sobre cómo los niños, quienes por falta de alimento, lo cambian por droga.
“Los chicos consumen boxer, consumen sustancias también como marihuana, bazuco, todo eso, hay ventas de esas drogas en los resguardos, personas ajenas van y los venden en los resguardos. Aunque nuestros chicos no salgan al territorio, los vendedores de esos consumos llegan al territorio”, aseguró.
Habló también de la desculturización, que es la supresión de la adquisición de cultura por parte de los mismos individuos de la comunidad, pues esto se está incrementando actualmente y ahora los jóvenes aborrecen a sus familias.
“Y ya cuando ellos cumplen los 18, ya no quieren regresar a la comunidad, rechazan totalmente la comunidad y tampoco ya no hablan español, entonces perdemos eso. Los chicos del contexto urbano tienen la dificultad de que no tienen profesor de lengua, tienen que estar estudiando en los colegios occidentales y las escuelas y eso hace que nuestros niños también se contaminen en el medio ambiente que tienen que vivir día a día y someterse a las leyes occidentales dentro de un régimen diferente”,dijo.
Y bueno, el panorama se pone peor cuando hablamos de las mujeres, quienes sufren de violaciones constantes.
“Nos ha tocado juntarnos con un blanco para poder poquito tener las garantías de alimentación, tener un techo y poder darles estudios a nuestros hijos allí, porque no tenemos acompañamiento ni tampoco como decir que no socialicen los temas de las leyes y de los decretos que existen. Las mujeres hiu desconocen los derechos, cuáles son los derechos de la mujer. Hay niños ya grandes de los abusos sexuales de la comunidad, que ya son niños que tienen 15 años, 16 años, que son de hijos, hijas de blancos, los accesos de abusos sexuales y que ahí están libres y no responden por los niños”, señaló.
Por su parte, Amanda González, también representante del pueblo Hiu, señala quiénes han sido los actores de estos terribles hechos. “Con los colonos, con los grupos armados, con los policías, con los ejércitos o con los autodefensas que lo dicen, porque hay muchas mujeres que sufrieron por las violaciones”, dijo.
A pesar de los esfuerzos que han hecho año tras año los gobiernos, parece que, como aseguran ellos, no ha funcionado nada.
Pues si dicen que hay falta de liderazgo de la unidad para las víctimas, tanto en el componente humanitario como en la formulación e implementación de planes de retornos y reubicaciones.
Hay reiteradas omisiones por parte de diferentes ministerios, entre esos el interior, en garantizar el fortalecimiento del gobierno propio y protección de la cultura de los pueblos.
También hay persistencia de problemas en la coordinación entre las diferentes entidades nacionales y territoriales. Por otro lado, no saben cómo abordar esta problemática, no tienen traductores y viven día a día en un limbo que ya no saben cómo manejar.