Marcó Pérez habló este lunes en El Vbar Caracol sobre la denuncia hecha en la noche del domingo por insultos racistas de Alexander Mejía en su contra, durante el duelo entre Unión Magdalena y Águilas Doradas por Liga.

El delantero chocoano indicó que el experimentado mediocampista le dijo “esclavo” en al menos tres oportunidades delante de dos compañeros. Asimismo develó que Mejía no se ha comunicado para pedirle perdón ni mucho menos.

Finalmente confirmó que hablará con Fernando Salazar, máximo accionista de Águilas, para saber cuáles son los pasos a seguir con la denuncia.

Así fue la discusión

Cuando estábamos 2-1, por allá en el minuto 70, empecé a tener una discusión con Mejía, de las que siempre pasan en el fútbol. Me decía “Vos te marcás solo, sos malo” y yo le decía “pareces un policía de tránsito, solo movés la mano”. Pero llegó un momento en el que se salió de los cabales y me empezó a decir “esclavo, muerto de hambre”. Lo de muerto de hambre se lo acepto porque sí, en un momento me tocó aguantar hambre porque vengo de abajo y eso lo puedo dejar en la cancha. Pero ya cuando me empieza a decir esclavo tres veces y que compañeros lo escucharan, eso ya no está bien. Le dije “Ah bueno”.

“Yo le iba a meter la mano”

Es un insulto racista. Me quedé tranquilo y por eso dije que quería ir a la rueda de prensa para decirlo. Yo me iba saliendo de los cabales. Cuando se puso las manos atrás, yo le iba a meter la mano, me le iba a tirar encima. Pero no quería hacerme expulsar y por eso quería ir a la rueda de prensa para que todo el mundo supiera lo que había tapado. No se pueden pasar por alto palabras como esas y más de un jugador como Mejía, que hace 15 días dio unas declaraciones del fútbol colombiano con cosas que tocaba cambiar. Esto también toca cambiarlo. Si me lo dijera un jugar de 19-20 años uno se le acerca y le dice que eso no se usa ya en el fútbol, que eso es racismo; pero que sea un tipo como él me da rabia. Las otras palabras que me dijo se quedan en la cancha porque son de calentura.

No es la primera vez que pasa con Mejía

Ya me han llamado dos personas a decirme que esas son palabras de él, ese vocabulario lo usa él dentro de la cancha y eso no está bien. El club me ha respaldado gracias a Dios y mis compañeros. Dije que no metería demanda, pero sí saldría a la rueda de prensa a hablar lo que dijo, yo estaba muy rabioso…Me dijeron que ese es su vocabulario, que él era muy agrandado en la cacha, es una bajadera de caña y peleadera, pero eso de las discusiones en la cancha se queda porque él defiende su institución y yo la mía. Ya al terminar el partido te das un abrazo, pero cuando escuchas que “vos sos un esclavo y muerto de hambre”, eso ya no entra en el fútbol colombiano.

El juez central no se percató de la situación

El árbitro y el balón estaban en otro lado. Como yo en el partido lo estaba marcando a él, por allá en el minuto 70, fue que empezó todo.

Nunca antes le había pasado algo así

Yo prácticamente llevo 16 años jugando en Argentina, Europa, Arabia y nunca había vivido eso. Tuve problemas con jugadores en el campo, pero eso quedaba ahí. Son palabras del fútbol. Ya después todo termina y nos damos un abrazo, las disculpas.

Medidas a seguir y testigos

No he hablado con don Fernando Salazar de frente, pero me llamó, me dio su apoyo. Le agradezco mucho. Cuando hable bien con él miraremos qué va a pasar, pero sí quería que se supiera. Había 4 compañeros míos cuando lo repitió y no lo dijo una sola vez sino tres veces… (Johan) Caballero y Alex Castro. Nosotros tres estábamos en la jugada.

Mejía no ha pedido disculpas

La verdad, a mí me deja triste esta situación por la clase de jugador que me lo dice y más de un jugador que cuando pasa algo en el fútbol colombiano alza la voz y quiere mostrar un ejemplo. Lo mínimo que uno espera como jugador es que lo llamen, le pidan disculpas, que reconozcan que se equivocaron y con eso que nuestro fútbol siga creciendo. Es lo que uno quiere. Yo no soy rencoroso, pero sí quedo triste por ser un jugador con tanta experiencia, que prácticamente me restregó sus 14 títulos, su Libertadores. Eso se queda en la cancha porque es normal y pasa siempre. Me ha tocado con muchos jugadores que uno dice que gano esto o lo otro, pero queda en la cancha. Uno como jugador espera que reconozcan las cosas y que al menos uno llamar y decir: “Me equivoqué”. Pero ni siquiera en la mañana o en la tarde llamarlo a uno, demuestra el tipo de persona que es uno. Eso me deja más triste aún.