Rodolfo Hernández: caso Vitalogic es la segunda acusación de la Fiscalía
La Fiscalía acusó a Hernández en 2014 por falso testimonio, pero un juez lo absolvió en 2018 cuando era alcalde de Bucaramanga.
Rodolfo Hernández / Getty Imagenes
El caso Vitalogic, por el que la Fiscalía acusó a Rodolfo Hernández, no es el primero que lleva al ingeniero a enfrentarse a los jueces de la República. En 2014, Hernández fue acusado por el delito de falso testimonio.
Antes de ser alcalde de Bucaramanga, la Fiscalía le imputó el delito de falso testimonio, por el que luego lo acusó en octubre de 2014. Hubo, además, en ese momento, una solicitud de orden de arresto en contra del hoy candidato presidencial y otra solicitud a la Oficina de Instrumentos Públicos de Bucaramanga para que le prohibiera a Rodolfo Hernández enajenar sus bienes dentro de los seis meses siguientes a la realización de la audiencia.
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En 2008, Rodolfo Hernández era el representante legal de una sociedad llamada Inversora San Carlos. En ese entonces, el ingeniero ofreció en venta unos predios ubicados en Villavicencio, Meta, a un señor llamado Samuel Rueda Gómez. En la negociación acordaron un valor de diez mil pesos por metro cuadrado y, además, que el valor total de los lotes resultaría de una medición para la que contrataron un topógrafo.
El señor Rueda Gómez le entregó al ingeniero, en noviembre de 2008, un anticipo de mil millones de pesos como parte del precio de los lotes, y cuando estuvo lista la medición que hizo el topógrafo, le informó a Hernández el resultado para proceder con la firma de las escrituras, pero la propuesta del señor Rueda no fue aceptada por Hernández, quien no adelantó ningún trámite para cerrar el negocio, sino que le vendió los predios a otra persona que le ofreció más plata.
Aunque la venta de los lotes a otros compradores le fue comunicada a Samuel Rueda en junio de 2009, en noviembre de ese año todavía no le habían devuelto la plata del anticipo. Ante la negativa de Hernández de devolver el dinero, el señor Rueda solicitó que le hicieran un interrogatorio.
Posterior al interrogatorio, el señor Samuel Rueda acusó a Rodolfo Hernández de lanzar expresiones que atacaban su honra y buen nombre de forma reiterada. Por ejemplo, el ingeniero acusó a Rueda de actuar de forma mañosa y caprichosa. Y según el demandante, Hernández, en su interrogatorio, también hizo afirmaciones que eran contrarias a la verdad.
La Fiscalía acusó al ingeniero de falso testimonio por decir, por ejemplo, que no hubo ningún documento suscrito entre él y el señor Rueda, cuando la defensa presentó pruebas documentales y testimoniales que demostraron lo contrario.
La decisión
El proceso judicial duró cuatro años, entre 2014 y 2018, cuando el Juzgado Segundo Penal del Circuito de Bucaramanga profirió sentencia a favor de Rodolfo Hernández.
La sentencia dice que Rodolfo Hernández «no miente de manera frontal, ni descarada, acerca de los hechos», sino que más bien lo que ocurrió fue un choque de «diferentes versiones o interpretaciones de un fenómeno contractual» que se resume en lo siguiente: aunque Samuel Rueda aseguraba que tenía una promesa de compraventa con Rodolfo Hernández, la versión del ingeniero era que se trató solamente de una oferta comercial que no tuvo efectos legales. Sin embargo, recibió el anticipo de Rueda por mil millones de pesos.
La sentencia fue apelada, tanto por Rueda como por la Fiscalía, que en la apelación dice que Rodolfo Hernández «desprestigió la administración de la justicia», pues omitió la verdad «con fines oscuros». Además, le pidió a los magistrados revocar la sentencia absolutoria y condenarlo por el delito de falso testimonio. Pero, en septiembre de 2019, el Tribunal Superior de Bucaramanga confirmó la decisión de primera instancia que favoreció a Rodolfo Hernández.
