Ciclista que recibió dos puñaladas está entre la vida y la muerte

Eran casi las 10:00 de la noche del martes 20 de octubre cuando Diego Alonso Diaz, un trabajador que se dirigía a su casa en bicicleta, fue sorprendido por siete hombres que saltaron desde los árboles que están en una zona de la calle 127 con Av. Boyacá y lo atacaron.

De una forma violenta, empujaron a Diego al piso, lo golpearon y patearon, le quitaron su bicicleta, la maleta que llevaba fue revisada, su saco y hasta el tapabocas fue robado. Los ladrones buscaban también su billetera, mientras lo seguían golpeando; con una navaja rasgaron su pantalón y finalmente lo apuñalaron en dos ocasiones, hiriendolo en un pulmón y en el corazón.

Los ladrones arrastraron al joven de 25 años a un costado de la vía y después escaparon. Hasta ese momento Diego no se había dado cuenta de la gravedad de sus heridas.

“Cuando mi hijo se dio cuenta, porque él sentía que caía líquido, vio que estaba lavado en sangre, salió a la vía y dos personas, uno en moto y otro en un carro pararon a ayudarlo y cómo pudieron lo llevaron a la clínica Santa María del Lago”, contó la mamá del joven atracado.

En la clínica, a Diego lo sometieron a una cirugía, está con ayuda mecánica para respirar y los médicos buscan salvarle la vida; mientras tanto, los responsables de este atraco no se han identificado. La familia del joven pide que se ubique a los ladrones y que también se haga algo más con la seguridad de los ciclistas.

El miércoles en el Concejo de Bogotá, en debate de control político sobre el manejo al tema de las bicicletas en la ciudad, el secretario de Seguridad, Hugo Acero, explicó que se ha pasado de 315 a más de 500 policías en el tema, se han hecho los enlaces de seguridad ciudadana y hay 290 gestores de convivencia. Además, se están asignando fiscales especializados en robos de bicicletas y se han realizado 21 acciones de inspección, vigilancia y control para verificar repuestos y bicicletas, sin embargo, estos casos siguen ocurriendo.