Crisis arrocera en el Huila invita al diálogo y la reconciliación
Desde la Iglesia se hace un llamado a superar el conflicto mediante el diálogo sincero.
No se puede continuar con posturas cerradas . Foto Redes Sociales. / oscar garces
Neiva
La situación que atraviesan los arroceros del Huila es preocupante. Este conflicto no solo afecta a quienes cultivan el arroz, sino también a toda la población que, directa o indirectamente, depende de este producto. Es comprensible que los productores se manifiesten, ya que las promesas hechas no se han cumplido, generando malestar y desesperanza.
Monseñor Marco Antonio Merchán, afirmo que “el llamado es a que se abran espacios de diálogo. No se puede continuar con posturas cerradas en las que cada parte cree tener la única verdad. Es urgente sentarse con humildad, escuchar y buscar salidas efectivas a una crisis que puede escalar si no se atiende a tiempo. Todos los sectores deben aportar para construir una solución”.
Los efectos de paros anteriores aún están presentes en la memoria colectiva. Las restricciones en movilidad, el desabastecimiento de víveres y los daños a productos transportados generan perjuicios para toda la comunidad. Incluso actividades religiosas y culturales se ven afectadas cuando se interrumpe la vida normal del departamento.
Desde la Iglesia se reitera la voluntad de colaborar como mediadora. El mensaje es claro, el diálogo es el camino. El dolor y el cansancio de quienes se sienten abandonados debe transformarse en un puente para la reconciliación. Que esta sea una oportunidad para escucharse, comprenderse y actuar con responsabilidad colectiva.