Retornaron a sus casas las familias refugiadas en la escuela y caseta comunal de La Llana
Estas 40 personas de Valdivia tuvieron que resguardarse en esos espacios ante los combates entre ilegales, pero estos ya cesaron. En la zona hay una tensa calma.
Valdivia, Antioquia
Las organizaciones sociales que denunciaron el riesgo en el que estuvieron varias familias de las veredas La Llana y La Coposa en zona rural de Valdivia por combates entre ELN y disidencias contra el Clan del Golfo, informaron que las familias que se habían refugiado en la caseta municipal y la escuela de La Llana donde habían quedado confinadas ya retornaron a sus casas luego de que terminaran los combates, pero el temor continúa. En total fueron un poco más de 40 personas.
Winston Gallego Pamplona, integrante de la Corporación Jurídica Libertad y de la Mesa Humanitaria de Paz de Antioquia, dijo que, aunque los grupos se retiraron de la zona en confrontación, en el territorio sigue una tensa calma porque permanecen en las zonas rurales.
“Afortunadamente no hubo afectaciones a bienes civiles, ni a animales o reses o algo de la comunidad, ni tampoco a la comunidad”, reportó el señor Gallego.
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Las comunidades les han indicado a las organizaciones sociales la necesidad de que a su territorio llegue la institucionalidad y no solo la fuerza pública sino también toda la oferta del Estado. Además, recuerdan la solicitud a los grupos ilegales y al gobierno nacional.
“También hacemos un llamado al Gobierno Nacional a avanzar en todo el tema de la paz total, pero que, ya sea en las mesas de negociación con el ELN o con el EMC, o en las nuevas mesas socio jurídicas que el Gobierno iba a instalar con las AGC, es innecesario poner como un punto de discusión el respeto a la vida de la población civil, el respeto y el cumplimiento del derecho internacional humanitario, pero también el respeto hacia los líderes y lideresas, sobre todo las comunidades rurales”.
Finalmente, solicitan que las autoridades estén en permanente monitoreo en la zona para evitar que los grupos que permanecen en el territorio se vuelvan a enfrentar y de nuevo pongan en riesgo a las comunidades.