Luto en el fútbol colombiano, especialmente en Millonarios. En la noche del pasado martes 2 de julio falleció Germán Gutiérrez de Piñeres, recordado defensor central de gran paso por el cuadro albiazul. El exfutbolista bogotano murió en la capital del país a la edad de 67 años, aunque por lo pronto se desconocen los motivos del deceso.

De Piñeres jugó toda su carrera en Millonarios, cuadro con el que se consagró “tricampeón” de la Liga. Estuvo presente en los títulos de 1978 (estrella 11), 1987 (estrella 12) y 1988 (estrella 13), siendo figura absoluta en la zaga del fondo. Adicional a ello, solo marcó un gol en su carrera, se lo hizo al Deportes Quindío, y llegó a ser entrenador interino del elenco bogotano.

Toda una vida vestido de azul

Germán Gutiérrez de Piñeres nació en Bogotá, pero fue criado en Barranquilla, ciudad en la que adelantó sus estudios. En 1978, a la edad de 21 años, debutó con el primer equipo de Millonarios y logró salir campeón. En aquella temporada, el cuadro azul se impuso en el cuadrangular final sobre Deportivo Cali (subcampéon), Atlético Nacional e Independiente Santa Fe, lo que significó su undécima estrella.

Nueve años después (1987), y siendo ya todo un referente de la institución, consiguió su segunda consagración liguera. El equipo capitalino se impuso con lo justo en el octogonal final sobre América de Cali, lo cual significó la duodécima estrella; y al año siguiente consiguió el bicampeonato tras imponerse en el octogonal sobre Atlético Nacional gracias a la diferencia de gol, lo cual terminó en su decimotercera estrella.

Su retirada deportiva se dio en 1990 y a partir de allí, siendo también profesional en la carrera de comunicación social, empezó a trabajar en las divisiones menores del club como entrenador. Su gran oportunidad en los banquillos le llegó para el año 2002 cuando dirigió, de manera interina, a Millonarios durante cuatro partidos (entre abril y mayo), tras la salida del yugoslavo Peter Kosanovic.

Tras esto pasó por equipos de segunda división y más adelante, en 2007, llegó a ser directivo deportivo del Boyacá Chicó, cuadro presidido por su excompañero Eduardo Pimentel y dirigido por Alberto Gamero.