Defensoría del Pueblo rechazó asesinato de líder minero en el sur de Bolívar

El defensor Carlos Camargo instó a poner en marcha medidas efectivas que permitan proteger de los defensores de derechos humanos

Defensor del Pueblo, Carlos Camargo. Foto: Colprensa.

Defensor del Pueblo, Carlos Camargo. Foto: Colprensa.

Cartagena

La Defensoría del Pueblo lamenta y rechaza el asesinato de Narciso Beleño, presidente de la Federación Agrominera del Sur de Bolívar (Fedeagromisbol), en un hecho acaecido en la zona urbana de Santa Rosa del Sur, municipio ubicado en la subregión del Magdalena Medio bolivarense.

“Narciso Beleño era reconocido por su permanente lucha en pro de los derechos humanos de las comunidades campesinas y abnegado compromiso con la preservación de la serranía de San Lucas, zona de conflicto entre grupos armados de la ley, como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC-Clan del Golfo), las disidencias de las Farc y la guerrilla del ELN “, expresa el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.

El escenario de riesgo fue advertido a través de la Alerta Temprana 034 del 2023, remarca el Defensor, “toda vez que dimos cuenta de los peligros para distintos grupos poblacionales de los municipios de Santa Rosa del Sur, Cantagallo, San Pablo, Simití, Morales y Arenal, en el sur del departamento de Bolívar.

En la Alerta Temprana es señalado cómo las personas defensoras de derechos humanos y lideresas y líderes sociales son susceptibles de todo tipo de vulneraciones por el escalamiento de violencia. “Por las mismas razones, emitimos en el documento defensorial 38 recomendaciones, para que las autoridades nacionales y locales implementen acciones bajo una perspectiva de derechos humanos y derecho internacional humanitario. No es una opción pasar de la retórica a la acción, hay que actuar”, recalca el Defensor del Pueblo.

De la misma forma en la Alerta Temprana 026 de 2018 se advertía el riesgo para los integrantes de la Federación Agrominera del Sur de Bolívar, a la que pertenecía Narciso Beleño.

La institucionalidad gubernamental, enfatiza Camargo Assis, “debe cerrar filas para hacerles frente a hechos como el ocurrido con el señor Beleño, brindándoles garantías de seguridad a quienes defienden y promueven el amparo de los derechos humanos de las comunidades en todo el país, especialmente de aquellas donde sugerir, hablar o reclamar es prácticamente, de manera infortunada, exponer su vida e integridad a las retaliaciones de los ilegales y al abandono del Estado”.

El Sistema de Alertas Tempranas (SAT) de la Defensoría reveló que durante el 2023 en Colombia fueron asesinados 181 líderes, lideresas y personas defensoras de derechos humanos; 160 de ellos eran hombres y 21, mujeres.

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