Significado de subir arrodillado o descalzo a Monserrate en Semana Santa 2023

El cerro de Monserrate es una de las atracciones turísticas más importantes de la ciudad, en donde no solo prima lo religioso, sino también lo deportivo, ya que muchos de los habitantes de la ciudad tienen la costumbre de subir caminando los 1.605 escalones a lo largo de los más de dos kilómetros que tiene el ascenso a la cima de la montaña. Igual, muchas personas que vienen de afuera visitan este santuario por la vista única que brinda sobre la ciudad de Bogotá y los paisajes que se pueden apreciar.

No obstante, en época de Semana Santa, muchas personas que profesan la religión católica visitan este cerro por costumbre o tradición. Un ejemplo de esto es el caso de los siete domingos a Monserrate, promesa que hacen los creyentes con intenciones sumamente personales. No obstante, hay algunos que llevan más allá su fe y realizan actos como subir los escalones de la montaña de rodillas o descalzos. A continuación, le contamos por qué hacen esto.

Por qué las personas suben Monserrate de rodillas o descalzos

Subir el Cerro de Monserrate de rodillas o descalzo, es una tradición que tienen algunos creyentes que profesan la fe católica, más que todo en época de pascua o Semana Santa. Esto puede llegar a tener un significado espiritual muy profundo para los feligreses, además, se tiene la creencia de que es una de las costumbres más antiguas de Bogotá.

Las razones principales por las cuales las personas suben la montaña de rodillas o descalzos son, por penitencia, para que todos los pecados cometidos sean perdonados, por promesas cumplidas, ya sea a nivel laboral, económico o familiar o simplemente para purificar el alma y renovar la fe.

No obstante, se estima que en Semana Santa, al rededor del 70% de visitantes son personas creyentes, por eso es que para muchos, subir Monserrate de esta manera es una forma de agradecer y pedir por la salud, la prosperidad y la protección de ellos y sus seres queridos. También se considera una oportunidad para reflexionar y para hacer una conexión más profunda con Dios, lo cual es uno de los sentidos de esta época del año.

Sin embargo, es importante resaltar que este ritual no es obligatorio ni necesario para ser una persona religiosa, puesto que cada individuo es el que toma su decisión y el responsable de sí mismo sobre cómo expresar su fe y su devoción durante la Semana Santa.

En resumen, subir arrodillado o descalzo a Monserrate en Semana Santa es una tradición significativa para muchos católicos en Colombia, que buscan purificar su alma, renovar su fe, agradecer y pedir por la protección divina, y hacer una conexión más profunda con Dios.