Un grupo de 34 congresistas estadounidenses enviaron una carta al secretario de Estado del país, Antony Blinken, haciendo un llamado a que la Administración Biden mantenga su respaldo a las políticas del gobierno de Gustavo Petro por beneficio para la ciudadanía de ambos países.

La carta es encabezada por los congresistas James McGovern y Mark Pocan y se incluye la firma de otros congresistas como Barbara Lee, Joaquin Castro, Alexandria Ocasio-Cortez o Dina Titus.

En el documento se establecen varios puntos de apoyo que sugieren tener como prioridad para las políticas estadounidenses, su atención y sus recursos:

Negociaciones con el ELN

Con el inicio de las nuevas conversaciones, los congresistas piden al gobierno Biden respaldar los esfuerzos por alcanzar una solución negociada a los enfrentamientos entre el gobierno colombiano y el ELN que se han extendido por 58 años.

En su llamado, se sugiere que haya una mayor vinculación a la negociación mediante la designación de un Delegado Especial que acompañe la conversación, así como ocurrió en las negociaciones con las FARC.

Paz Total

Los congresistas piden respaldar la idea del gobierno Petro de negociar con otros grupos armados. Se rescata que esta idea incluye no extraditar los miembros de grupos criminales a Estados Unidos como beneficio para que se desmovilicen, reparen a las víctimas y entreguen verdad completa.

En su llamado, los congresistas sugieren flexibilizar las políticas y solicitudes de extradición. A su vez se pide ofrecer “acuerdos humanitarios preliminares” que hagan que los grupos armados respeten los derechos y la integridad de la ciudadanía.

Otras políticas

En el documento se pide apoyar medidas clave como las propuestas de refugiados y migración teniendo en cuenta que Colombia es el país que más venezolanos ha acogido. También se sugiere ayudar a Colombia en sus planes de fortalecimiento ambiental para combatir el calentamiento global.

La carta también llama a proteger todos los eslabones de las estrategias de seguridad y de combate a la corrupción. Según los congresistas, Estados Unidos tiene la oportunidad de respaldar las políticas colombianas para cortar los lazos entre grupos ilegales y los miembros de la rama judicial.

La misiva resalta que también debe continuar el apoyo a la implementación de los Acuerdos de Paz alcanzados con las FARC en 2016, especialmente invirtiendo en áreas que han tenido problemas en su implementación.