México acudió el domingo 2 de junio de manera masiva a las urnas en medio de histórica jornada que, según datos de las autoridades electorales, dan por ganadora a Claudia Sheinbaum, física y aspirante del oficialismo de izquierda, como la nueva presidenta.

Sheinbaum se impuso en las urnas ante la senadora de centroderecha de raíces indígenas, Xóchitl Gálvez, quien se perfilaba como la otra favorita, y deberá conducir en los próximos seis años a un país asolado por la violencia del narcotráfico, donde un promedio de 10 mujeres son asesinadas cada día.

“Agradezco también porque, por primera vez en 200 años de la República, me convertiré en la primera mujer presidenta de México. Y, como lo he dicho en otras ocasiones, no llego sola, llegamos todas con nuestras heroínas que nos dieron patria, con nuestras ancestras”, expresó en un mensaje en la Ciudad de México.

Estas fueron las primeras declaraciones de Sheinbaum tras el conteo rápido del INE, que estima de manera oficial un rango de entre 58,3 % y el 60,7 % de los votos para la oficialista por encima del 26,6 % a 28,6 % de su rival más cercana, la opositora Xóchitl Gálvez, y el 9,9 % a 10,8 % de Jorge Álvarez Máynez.

Actos violentos obligaron el sábado a suspender los comicios en dos municipios de Chiapas (sur).

Unas 450.000 personas fueron asesinadas en México y decenas de miles están desaparecidas desde 2006, cuando el gobierno de entonces optó por sumar a los militares al combate contra las mafias.

Para la instancia están convocados unos 100 millones de electores de este país con tres husos horarios, donde las casillas abrieron entre las 13H00 y las 15H00 GMT.

Visiones contrapuestas

Los seguidores de Sheinbaum creen que garantiza el legado de López Obrador, destacan su eficiencia como alcaldesa de Ciudad de México (2018-2023) y la ven como una “inspiración” para las mujeres de este país con altas tasas de violencia de género, donde unas 10 mujeres son asesinadas diariamente (feminicidos y homicidios dolosos), según ONU Mujeres.

“Una mujer presidenta será una transformación (...) Esperemos que haga más por las mujeres. La violencia contra la mujer está al 100%”, dijo la limpiadora Clemencia Hernández, de 55 años, que vota por Sheinbaum.

Durante su gobierno, López Obrador distribuyó millonarias ayudas directas a ancianos, jóvenes y discapacitados que sacaron a 8,9 millones de personas de la pobreza. Un tercio de la población aún vive no obstante en esa situación.

“Nunca un gobierno antes se había preocupado tanto por los adultos mayores”, aseguró Hernández.

En una mesa de votación del acomodado barrio capitalino de Polanco, Eunice Carlos, de 70 años, sostuvo que este gobierno fue “un martirio”. “Ha sido un presidente muy nefasto, en primer lugar porque nos dividió (...) Mi voto va para la democracia con Xóchitl Gálvez”, dijo.

Así se vivió la jornada: