Los problemas de Transmilenio, según The Economist
La revista analiza las posibilidades que tiene la nueva alcaldesa, Claudia López, con este sistema.
La publicación británica dedicó un artículo de su más reciente edición a analizar el Transmilenio, asegurando que fue la primera gran ciudad en implementar este sistema de tránsito rápido, diferente a un metro, a gran escala.
The Economist destaca que durante sus primeros años, tras ser inaugurado en el 2000, redujo de 90 minutos a 70 minutos el tiempo de desplazamiento en la ciudad y con un costo seis veces menor que el de la construcción de un metro. También dice que ayudó a todas las clases sociales e incluso a la economía de la capital.
Pero ahora dice que el sistema está bajo fuertes problemas y tensión, porque cada hora transporta 15.000 personas más que la capacidad para la que originalmente fue creado, por lo que los buses van extremadamente llenos y los tiempos de espera han aumentado.
La revista agrega que los últimos alcaldes no le han invertido lo necesario. Por ejemplo, Samuel Moreno se vio involucrado en casos de corrupción, y Gustavo Petro redujo las tarifas del Transmilenio, lo que generó un déficit en el sistema.
Ahora The Economist dice que Claudia López hizo campaña a favor de otro sistema de transporte, preferiblemente subterráneo en lugar de expandir el Transmilenio como pensaba Enrique Peñalosa.
Pero la publicación también menciona que, la nueva alcaldesa podría cambiar su pensamiento y buscar formas más baratas de aliviar el estrés de los ciudadanos en el transporte.
La revista dice que podría estar pensando en otros sistemas rápidos sobre la 68 para unir a los barrios con el centro de la ciudad y que también ha hablado de arreglar los buses y mejorar las estaciones de Transmilenio. Esto mientras busca mejores alternativas a un costoso sistema subterráneo.