Renuncia del Padre Javier de Nicoló causa polémica en Bogotá

Luego de casi 40 años de trabajo en favor de la población vulnerable de Bogotá, el Padre Javier de Nicoló renunció a la dirección del Instituto Distrital para la Protección de la Niñez y la Juventud, Idipron. El Padre Javier de Nicoló es italiano y llegó a Colombia como misionero en 1948. Desde entonces, se dedicó a una importante labor humanitaria y de rehabilitación que comenzó en la Cárcel de Menores. Como director del Idipron, el sacerdote se encargó de atender a miles de niños y jóvenes abandonados, así como habitantes de la calle que gracias a su ayuda lograron superar los problemas de drogadicción. La Secretaria de Integración Social, Mercedes Ríos, aseguró que el Padre Javier de Nicoló renunció por voluntad propia. "Es una decisión voluntaria debido también a su edad. El Padre para nosotros es un cónsul de la niñez y la juventud de Bogotá y esperamos que nos siga acompañando, posiblemente ya no devengando un sueldo, pero esa institución sin él no creo que funcione lo mismo", manifestó la funcionaria. Sin embargo, Caracol Radio conoció que detrás de la renuncia del Padre Nicoló está un derecho de petición anónimo que llegó a la Secretaría General de la Alcaldía, reclamando su salida por haber cumplido la edad de pensión. "Es algo que nos parece muy sospechoso y por eso más de 30 concejales le enviaremos una carta respetuosa al alcalde Samuel Moreno, pidéndole que revise jurídicamente la continuidad del Padre como director del Idipron", dijo la concejal Gilma Jiménez. Por su parte, la concejal Patricia Mosquera, lamentó la renuncia del sacerdote. "El Distrito tiene que fortalecer el Idipron porque de lo contrario, tendrá una bomba de tiempo al no existir quien lidere la resocialización de los habitantes de la calle y de los pandilleros de la ciudad", dijo. Según voceros de la administración distrital, el Padre Javier de Nicoló trabajará hasta finales de septiembre.