Hipertensión, colesterol, anemia y más: enfermedades que la piña ayuda a prevenir, ¿cómo?
Diversos estudios han demostrado los aportes nutricionales de esta fruta, le contamos cuál es la mejor forma de consumirla.
Durante años y gracias a diferentes investigaciones realizadas, se han encontrado varios beneficios del consumo de frutas como la piña, también conocida como ananá y proveniente de Sudamérica.
La piña se destaca por ser fuente de vitamina C y yodo, según indica la Fundación Española de la Nutrición: “su contenido en azúcar y en principios activos se duplica en las últimas semanas de maduración, por lo que los frutos recolectados prematuramente resultan ácidos y pobres en nutrientes. Si ha sido bien madurada contiene alrededor del 11% de hidratos de carbono”, explican
Desde ‘El poder del Consumidor’, organización mexicana que estudia los productos, señalan que el 89% de la piña es agua, el resto, la mayoría, son los azúcares naturales de la fruta y fibra.
Enfermedades que la piña ayuda a prevenir
La Cámara Nacional de Productores y Exportadores de Piña – CANAPEP de Costa Rica, aseguran que este producto es “excelente para las dietas adelgazantes. Impide la agregación plaquetaria, con lo cual evita que la sangre se coagule y, de esa manera, previene las embolias y los infartos del corazón”.
Además, la piña suele ser recomendada para tratamientos de padecimientos como:
- Retención de líquidos (actúa como diurético)
- Problemas de tránsito intestinal y estreñimiento (por su gran poder laxante)
- Hipertensión, colesterol y anemia
- Intoxicaciones (funciona como depurador)
Mire también:
- Trastornos del sistema inmunológico (refuerza en la disminución de defensas y ayuda a la formación de glóbulos rojos y blancos)
- Problemas degenerativos y cardiovasculares
- Mala circulación sanguínea
- Obesidad
- Problemas en el crecimiento óseo, tejidos y sistema nervioso en los niños.
¿Por qué la piña es buena para prevenir algunas enfermedades?
- Hipertensión: la piña es una fuente natural de potasio, un mineral que ayuda a equilibrar los niveles de sodio en el organismo. El exceso de sodio puede contribuir a la hipertensión arterial, por lo que un consumo adecuado de potasio puede ayudar a reducirla.
- Colesterol: la piña es una buena fuente de fibra dietética, soluble e insoluble. La fibra soluble ayuda a reducir el colesterol LDL (malo) al unirse a él en el intestino y evitar su absorción.
Además, contiene compuestos fenólicos, como la bromelina, que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Estos compuestos pueden ayudar a proteger las LDL del daño oxidativo, reduciendo el riesgo de enfermedades cardíacas.
- Anemia: la piña contiene una cantidad moderada de hierro, un mineral esencial para la producción de hemoglobina, la proteína encargada de transportar oxígeno en la sangre. La deficiencia de hierro puede provocar anemia.
- Artritis: según revisiones publicadas en Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine, la piña tiene propiedades antiinflamatorias que podrían ser útiles para calmar el color de la artritis inflamatoria. Ese alimento no cura la artritis, pero puede ser beneficioso en la dieta de paciente que la padecen por su contenido de bromelina.
Cómo elegir una piña
- Olerla y confirmar que desprende su aroma característico.
- El color de la cáscara es más bien naranja, dorado, menos verde.
- Fijarse que no está sudando en la parte de abajo.
- Al jalarlas, las hojas centrales se desprenden fácilmente.
La mejor forma de consumirla, según los expertos de CANAPEP es en rodajas o cubos, siempre y cuando esté fresca la fruta.