La migración del lenguaje audiovisual

El debate ha sido abierto, por como las gentes se han apropiado de los contenidos, como en el caso de la película Roma de Alfonso Cuarón; ya que terminó siendo más una discusión que una película. Con la idea ya en el concierto de las artes visuales y su distribución, cada vez son más las apuestas por crear contenidos a partir de dispositivos como los celulares y el mismo sistema de VR.

Igualmente, la inmediatez de la televisión y de las plataformas de streaming, el cine alcanzo niveles de esfuerzo por una colectividad o mejor dicho por la integración que le apuestan a ver desde sus dispositivos electrónicos, todo el contenido cinematográfico. En esta medida, con las nuevas tecnologías de información, se está generado una transición hacia tendencias animadas por la viralización y la reproducción, que desatan en la sociedad sus necesidades y potencialidades bajo el concepto de la inmediatez, como una forma de enfrentarse al mercado cinematográfico que involucran el campo de lo cultural y lo político. Pero las sociedades postmodernas son cada vez más subjetivas, en la que sus conductas, pasan por llegar a desenvolverse dentro de un universo social, a partir de, emociones e imágenes propias, sin separarse de la sociedad y manteniendo el concepto de individualidad mezclado con ideologías, posiciones, sentimientos, sensaciones, que brindan una cultura para el desarrollo de una conducta propia a la supervivencia.

Los procesos acelerados de las fluctuaciones políticas y de violencia, desarrollados en la actualidad, se están convirtiendo en escenarios para la realización de contenidos audiovisuales que retraten esas manifestaciones y llamamientos por un cambio social.

 “los adolescentes equipados con confesionarios electrónicos portátiles no son otra cosa que aprendices entrenados en las artes de una sociedad confesional -una sociedad que se destaca por haber borrado lo limites que separan lo privado de los público, por haber convertido en virtudes y obligaciones públicas el hecho de exponer abiertamente lo privado, y por haber eliminado de la comunicación pública todo lo que se niegue a ser reducido a una confidencia privada y aquellos que se rehúsan a confesarse.” (Bauman: 2007; p.14).

Finalmente, el mundo de las imágenes en movimiento se exhibe de manera nítida, como un conjunto de profundas transformaciones culturales, junto con ellas, van ganando visibilidad aparatos conceptuales destinados a interpretarlas, de manera tímida y abrumadora, simultáneamente con la sistematicidad de las formulaciones que sustentan la libertad y la autonomía del debate, con las vocaciones políticas que lo inflan y especialmente, en este juego del lenguaje audiovisual que va a desplegar en un futuro. Con cada uno de los mundos sociales por donde circulan las imágenes, poseen una estructura, que habrán cosas que pueden decirse y otras que no, con  estos aspectos la perspectiva hegemónica está asociada una noción la de la sociedad del conocimiento, y lo hace al menos en cuatro campos: la economía, los medios de comunicación, los organismos internacionales y las políticas públicas.