Farc y paramilitares se disputan control de mayor región de coca

BOGOTA --- El Putumayo, la región de mayores cultivos de coca de Colombia, se ha convertido en territorio de guerra entre rebeldes de las FARC y paramilitares, que se disputan el control del negocio en medio del terror de la población, según un programa de radio que se transmitirá mañana domingo en decenas de países.
El programa, que será emitido por la cadena radial colombiana "Caracol", fue elaborado por el reportero de guerra Herbin Hoyos, herido hace varios meses en Chechenia y quien anticipó a EFE detalles sobre la situación en esa zona de la selva amazónica, que limita con Ecuador.
Según fuentes militares, las FARC intentan recuperar el dominio del Putumayo, luego de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), llegaran al Putumayo, donde hay 80.000 hectáreas sembradas de coca, y que persiguen a los guerrilleros hasta la provincia de Sucumbíos.
Hoyos, que logró llegar a La Dorada (Putumayo, a más de 1.000 kilómetros al suroeste de Bogotá), indicó que en los combates participan tres frentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que celebran negociaciones de paz con el Gobierno desde hace un año.
Las FARC lanzaron hace dos semanas un "paro armado" indefinido para bloquear a los paramilitares, en medio del cual quedó atrapada la población, según denunció el gobernador regional, Jorge Devia.
Las AUC llegaron el mes pasado a la región a combatir al frente 48 de las FARC, y más tarde al 15 y 32, que están a sólo 3 kilómetros del pueblo.
El mes pasado fue asesinado por la guerrilla un paramilitar que era sacado en una ambulancia, lo que provocó una fuerte protesta del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), que anunció que no colaborará más por falta de garantías.
El comandante "Byron" de las AUC admitió que fue "un error" de uno de sus hombres producto de la tensión de la situación, pero que las puertas para la prensa y la Cruz Roja "están abiertas".
Ademas, las FARC han atentado más de cincuenta veces en 15 días contra el oleoducto Trasandino, provocando un desastre ecológico.
El pasado 28 de septiembre, mientras los presidentes de Colombia, Andrés Pastrana, y de Ecuador, Gustavo Noboa, inauguraban un puente sobre el río San Miguel, un comandante de las FARC ordenaba por radio "darle la bienvenida" al primero y, dos horas más tarde, la tubería ardía en cinco tramos.
Aunque la XXIV Brigada del Ejército colombiano ha destruido este año 17 centros de procesamiento de drogas, muchas veces los narcotraficantes envían pequeñas cantidades de droga de mala calidad para que las atrapen, mientras pasan ocultos cargamentos más grandes.
El Ejército aseguró haber confiscado este año 1.600 kilos de pasta básica de coca y 500 kilos de cocaína pura camuflada en vehículos, pero los traficantes calculan que por cada 200 kilos decomisados, "salen" 1.000, cifra que se produce a veces sólo en una semana y por la cual la guerrilla cobra un "impuesto" de 500.000 pesos (200 dólares).
Según distintas fuentes, el 80 por ciento de los almacenes de La Hormiga y La Dorada son de suministros agrícolas para el negocio de la coca y la única sucursal bancaria estatal de la región recoge cada semana casi 1,5 millones de dólares en depósitos.
El conflicto se agrava con la llegada de armas para ambos bandos por Brasil, Ecuador y Perú, y cada uno de ellos instala retenes para frenar el paso de provisiones.
"Nosotros estamos atendiendo un llamado del pueblo que se cansó de los abusos de la guerrilla, el impuesto que nosotros cobramos es cinco veces menor que el que cobraba la guerrilla", expresó "Byron".
Sobre los supuestos nexos entre las AUC y las fuerzas oficiales, el paramilitar señaló: "Somos una organización ilegal pero legítima. La diferencia es que nosotros no tenemos a la Procuraduría detrás y por eso le podemos 'dar' a la guerrilla como le damos, sin compasión".