“Hay que retomar la fumigación”: Vargas; “Él está mal informado”: Pardo
El candidato presidencial aseguró que los procesos de erradicación voluntaria de las plantaciones de coca han sido un fracaso.
Los procesos de erradicación voluntaria de las plantaciones de coca han sido un fracaso y de ahí la necesidad de volver a las fumigaciones con glifosato, aseguró el candidato presidencial Germán Vargas Lleras.
Dijo que no tiene presentación que cuando dejó el Ministerio de Justicia en el 2012, había 42.000 hectáreas de coca y ya estamos llegando a las 200.000 hectáreas.
Añadió que los procesos de erradicación voluntaria han sido un fracaso, porque no llegan a 3.000 hectáreas, y lo más curioso es que en la ubicación de todas las zonas de capacitación o zonas de distensión coinciden con los mayores centros de producción y de exportación de droga.
De acuerdo con Vargas Lleras, a esto se suma la suspensión de la fumigación de las plantaciones de coca en la zona de frontera con el Ecuador y con el proceso de paz con las Farc.
Explicó que lo claro es establecer si las Farc van a contribuir o no en el proceso de erradicación de las plantaciones ilícitas existentes en diferentes regiones del país.
Al ser preguntado sí volvería a la fumigación con glifosato respondió: “No tengo ninguna vacilación, si queremos avanzar en verdad en disminuir el área sembrada en Colombia, hay que apelar también a todas las formas en el cumplimiento de nuevas metas”.
Responde el Gobierno
Ante las declaraciones de Vargas, el ministro para el Posconflicto, Rafael Pardo, recordó que fue la Corte Constitucional la que ordenó suspender la erradicación de cultivos mediante la fumigación del glifosato.
“En términos del programa de sustitución, creo que él está mal informado, y en términos de fumigación pues la Corte Constitucional fue la que determinó que no podía haber fumigación ni aspersión aérea de cultivos ilícitos”, manifestó.
Agregó que, “el doctor Vargas es candidato, yo no soy candidato y no tengo porque hacer un debate sobre temas que tienen que ver con su aspiración política”.
Actualmente, el programa para la sustitución de cultivos ilícitos tiene más de 115.000 familias inscritas, más de 25.000 firmaron los pactos individuales para reemplazar por otros productos más de 20.000 hectáreas de coca.