Entre $500.000 y $1 millón paga el Clan del Golfo para asesinar policías en el norte del país

Los uniformados en Antioquia, en el Urabá, y regiones donde opera con fuerza el Clan del Golfo saben que esta organización criminal puso precio por sus cabezas.

Por eso, por orden impartida desde la Dirección Nacional de la Policía debieron tomar medidas especiales. No volverán a patrullar solos. Cada uno de sus recorridos deberá estar acompañado de mínimo tres o cuatro motocicletas acompañadas de policías armados.

Todos los uniformados deberán portar chalecos antibalas, cascos, y armamento largo si tienen que desplazarse a Caucasia, Zaragoza, Nechí, El Bagre, Antioquia, regiones infestadas por hombres del Golfo.

También deben corroborar cada llamado de la comunidad para descartar trampas. Y en los restaurantes, en horas de almuerzo, un grupo podrá almorzar, pero otro deberá cuidarlos a las afueras del establecimiento.

El coronel Wilson Pardo, comandante de la Policía de Antioquia, reconoció en su momento que las operaciones adelantadas por hombres de su institución en el norte del país, especialmente en Urabá, “ha generado actividades de retaliación en contra de los uniformados".

Y anunció que seguirán con todas las operaciones en contra del Clan del Golfo "hasta acabarlos".

Solo en Antioquia cuatro policías han sido asesinados en las últimas semanas y los responsables de sus crímenes son alias El Indio, o Aristides Mesa Páez, uno de los hombres más cercanos a alias Otoniel y por quien las autoridades ofrecen hasta $500 millones de recompensa por su paradero.

Hace tres días, en un enfrentamiento con la Policía terminó herido y capturado ‘Caliche’ o el ‘Profe’. Y en su celular tenía unos mensajes de hombres del Clan del Golfo donde le ordenaban asesinar a policías de Antioquia y en las zonas donde opera esta organización criminal.