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Las preguntas de Mohammad Ali

Siempre fui muy curioso. Me preguntaba por qué la mujer tiene que estar en la cocina sirviendo.

Las preguntas de Mohammad Ali

Las preguntas de Mohammad Ali(EFE Servicios)

–Siempre que iba a la Iglesia los sábados me preguntaba cosas, muchas cosas porque no sólo soy un boxeador, también leo, también estudio y cuando viajo hago preguntas –comienza diciendo Mohammad Ali en una entrevista que le hizo la BBC en 1971 y que tras su muerte anda dando vueltas por ahí. 

–Siempre le preguntaba a mi mamá ¿mamá por qué en la última cena todos son hombres? ¿por qué los ángeles son hombres? –continúa mientras el presentador lo escucha atentamente. Pregunté ¿mamá al morir iremos al cielo? Ella dijo “claro que iremos al cielo” Y respondí “entonces ¿qué pasa con los ángeles mujeres? Dije “ya sabes, es porque los ángeles mujeres también están en el cielo pero están en la cocina haciendo leche y miel”. 

La gente del auditorio se ríe y aplaude, y tras darles unos segundos, Ali retoma su intervención. 

–Siempre me pregunté ¿por qué la mujer tiene que ser virgen o acostarse con pocos para ser digna de respeto? ¿Por qué no puede acostarse con tipos lindos, tener su propia casa y mucho dinero y aún así ser digna de respeto? ¿Por qué tiene que estar en la cocina sirviendo leche y miel para ser considerada una buena mujer? Le dije a mi mamá “¡no creo que les guste cocinar y andar sirviendo leche y miel, creo que les gusta descubrir el mundo haciendo lo que quieran y ser independientes y comprar con su propio dinero todo lo que quieran incluidas la leche y la miel!” Siempre fui muy curioso –dice de nuevo mientras vuelven a aplaudirlo. Siempre me preguntaba ¿por qué el papa, la cabeza visible de Dios en la tierra es un hombre? Es un hombre en medio de un mundo repleto de mujeres que se la pasa diciéndoles a ellas lo que pueden hacer con su cuerpo. Él nunca ha estado con una mujer, su contacto con ellas es mínimo pues en el Vaticano lo que abundan son los hombres y sin embargo se supone que sabe mejor que ellas lo que deben hacer. Me preguntaba por qué los directivos de las empresas casi siempre son hombres habiendo tantas mujeres calificadas para esos puestos, por qué los presidentes casi siempre son hombres y los neurocirujanos son hombres pero las enfermeras son mujeres, por qué en la publicidad el hombre aparece rodeado de mujeres arrastrándose a sus pies pero ellos nunca están en el piso mirando desde abajo a una mujer que se impone sobre ellos. Me preguntaba por qué miss universo tiene que sonreír todo el tiempo, por qué al cumplir los quince años hay que ponerse medias veladas y tacones para mostrarle a la familia y los amigos que la niña ya tiene senos y básicamente ya está disponible; por qué las monjas se casan con Dios pero los curas son algo así como sus mejores amigos, por qué las revistas para mujeres se dedican a dar consejos de maquillaje, sicología, moda, culinaria y artes amatorias para satisfacer al hombre, pero las revistas de hombres se dedican a mostrarles a ellos los relojes, carros, colonias y mujeres que se supone pueden o deben tener. 

Ok. Eso no fue lo que dijo Muhammad Ali. Pero fue lo que pensé mirando su video. Basta con cambiar un par de palabras para ver que así como el racismo un día fue lo más natural, aún hoy y con métodos muy parecidos se hace lo mismo con el machismo. Sugiero ver el video aquí https://www.youtube.com/watch?v=0k7Ir1bWjyM&feature=share 

Pd: Iba a escribir sobre el hashtack #yonomequitolaropa que andaba dando vueltas en Facebook para oponerse a la obra que Spencer Tunick hizo en Bogotá y de la cual hice parte, pero los “argumentos” me resultaron tan absurdos que no vale la pena ni discutirlos. Sirven eso sí para corroborar que lo dicho en esta entrada es estremecedoramente cierto. Sugiero darse una pasada por allí.

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