En el Chocó ya no se ríe. Se llora demasiado: obispo de Istmina
Monseñor Julio Hernando García denunció la crisis humanitaria que se vive a raíz de la violencia.
El departamento del Chocó “pide a gritos” la intervención y atención del Gobierno Nacional debido a la crisis humanitaria, social y el incremento de violencia. Ese es el mensaje que el obispo de Istmina, Julio Hernando García, expuso ante la Asamblea General de Obispos en Bogotá. “No se vive en condiciones dignas. El Chocó se está volviendo un territorio de violencia. Los negros y los indígenas no vivían así”, manifestó
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El prelado Julio Hernando García afirmó que es necesario cesar la ola de violencia y terror en ese departamento donde escasea hasta la comida
“La alegría se ha perdido. Se llora demasiado. Allí se vivía en abundancia de comida, ahora la gente aguanta hambre. Los niños se mueren de desnutrición y los ancianos no tienen comida”, reiteró
Las bandas criminales, narcotraficantes y guerrilla han hecho del Chocó, según obispo García, “un lugar donde se perdió la condición humana”
A través de un comunicado firmado por todos los obispos del país, los prelados aseguraron que el Chocó vive un abandono estatal, y que "existen diversas bandas criminales y hay un alto número de asesinatos. Igualmente crece el narcotráfico y la drogadicción en niños y jóvenes, aumenta la violencia sexual y el maltrato a la mujer".
