Cultura

¿Qué pasó el 7 de agosto en el Puente de Boyacá?

El 7 de agosto de 1819 se libró la Batalla de Boyacá, en el cruce del río Teatinos, en inmediaciones de Tunja, que garantizó el éxito de la Campaña Libertadora de Nueva Granada.

¿Qué pasó el 7 de agosto en el Puente de Boyacá?

Es así como se consolidó el Ejército que desde esa fecha ha sido sustento fundamental de la nación colombiana. Por esta razón se puede afirmar que la historia del Ejército nacional, se entrelaza con la historia de la Patria

Para ese entonces, las tropas patriotas estaban compuestas por venezolanos, granadinos y algunos grupos extranjeros, como la legión británica

Sus integrantes eran criollos, mestizos, mulatos, zambos, negros e indígenas, generalmente gentes pobres, escasas de alimentos y vestidos, llamados por las autoridades españolas "insurgentes". El ejército tuvo mucho apoyo popular de los granadinos, y en especial de los campesinos de Tunja

El ejército realista estaba conformado por 2670 soldados, de los cuales 2300 eran de infantería, 350 de caballería y 20 de artillería. Éste pertenecía a la tercera división del ejército expedicionario de la Reconquista. Su comandante general era el coronel José María Barreiro; el jefe del estado mayor, el coronel Sebastián Díaz, y la vanguardia estaba comandada por el coronel Francisco Jiménez

Los soldados patriotas presionaron con heroísmo contra las fuerzas de Barreiro. La infantería patriota, con perfecta disciplina y asombrosa actividad militar, hizo un movimiento rápido y envolvente

Por su parte, el coronel Juan José Rondón con sus lanceros de llano arriba recibió la orden de atacar por el centro al ejército realista. Los lanceros de Rondón arremetieron con ímpetu a la infantería realista, que incapaz de resistir retrocedió en desorden

Un escuadrón de la caballería realista huyó por el camino de Samacá sin presentar resistencia. Asimismo, los patriotas aniquilaron al Batallón 2 de Dragones del ejército español

El ejército patriota había vencido heroicamente el frío del páramo de Pisba. Las ropas andrajosas e inapropiadas, por lo escasas, tenían golpeada la moral de la tropa. No en vano, el general José María Barreiro, al hablar de la presentación de los guerreros libertadores, los llamaba ‘ejército de desharrapados’

Cuenta la historia que la aparición providencial de Estefanía Parra, una pastora de 10 años, oriunda del lugar, guió el paso de las tropas hasta la otra orilla. Confundidos, los hombres de Barreiro se dispersaron. El intento de recomponer líneas fracasó. A las cuatro de la tarde, Santander lanzó una carga sobre el puente. Salvador Salcedo fue el primero en cruzarlo.

El siguiente artículo se está cargando

Escucha la radioen directo

Caracol Radio
Directo

Tu contenido empezará después de la publicidad

Programación

Ciudades

Elige una ciudad

Compartir

Más acciones

Suscríbete

Tu contenido empezará después de la publicidad