Los 'piratas' suplen la falta de buses alimentadores

Subirse a un bus alimentador en las llamadas "horas pico" se ha vuelto una tortura para miles de usuarios del sistema Transmilenio en Bogotá, al punto que el servicio ya es suplido por carros escolares y vehículos especiales

Claudia Figueroa, usuaria de Transmilenio en el Portal del Norte, afirmó que desde hace muchos días no ha podido subirse a un alimentador en horas de la mañana, pues cerca de su casa "pasan muy pocos y todos repletos"

Afirma que usa la ruta 2.5 San Cristobal y lo espera en la calle 170 frente al Colegio de la Salle. "Pero subirse a un alimentador es una lotería, porque siempre pasan repletos", insiste la señora Figueroa

Señaló que durante las últimas semanas se ha incrementado en el sector el transporte "pirata" hacia el portal. Por mil pesos, los conductores de micros y busetas escolares o de turismo recogen a los usuarios que se cansan de esperar el alimentador y los llevan hasta frente al puente de ingreso al Portal del Norte

El servicio ya es tan común, que aunque no llevan avisos, los usuarios los reconocen a lo lejos. El problema es que el costo se le encarece a los usuarios, pero "toca pagar o si no, nunca llegamos puntualmente" a sus sitios de trabajo o estudio

Un conductor, que no quiso revelar su nombre, dijo que prestan un servicio rápido y eficiente, que es necesario ante la precariedad del que presta Transmilenio

La escena se repite en la mayoría de rutas de los alimentadores que llegan a dicho portal.