El periódico El Tiempo celebra 100 años de fundación

Roberto Pombo, director general del periódico El Tiempo, aseguró que este aniversario no sólo es un orgullo sino un gran reto hacia el futuro

“Representa un logró de todo un siglo, de haber pasado por momentos muy difíciles de la historia de Colombia y de la historia del periódico”, manifestó

Señaló que cumplir 100 años significa “haber vivido el desarrollo de las comunicaciones desde lo más ‘precario’, que podría ser la manera de informarse hace un siglo, y la sofisticación que es ahora”

Sin embargo, Roberto Pombo, dijo que ahora se presenta un gran reto frete a las nuevas tecnologías que se apoden del mundo de la información

“El retos es hacer que un periódico centenario no sea simplemente el símbolo de lo pasado, sino tener la posibilidad, la audacia, la astucia de poner al periódico en el camino de las comunicaciones del nuevo siglo”, comentó

El director general del periódico El Tiempo dijo que lo más destacable de la historia del diario es que ha estado amarrada al desarrollo de Colombia

“Ha tenido los mismos éxitos y los mismos errores de la política colombiana, ha sido influyente, ha ido de la mano de la historia del país”, indicó

Sin embargo, dijo que destacaría, sobretodo, “el esfuerzo de orientar, de ser independiente, de no depender de ninguna de las formulas del poder”

Por su parte el excodirector del diario, Enrique Santos, aseguró que cumplir este aniversario lleva a hacer grandes reflexiones y sobre todo a entender lo que ha significado el periódico para el país. “Entenderlo como un referente de tolerancia, de democracia, de pluralismo, de libertad de expresión en la historia nacional. Creo que El Tiempo ha sido este referente y su reto es seguirlo siendo hacia el futuro”, manifestó. Santos aseguró que aunque es difícil destacar momentos durante estos 100 años de trabajo, recordó grandes cubrimientos como la llegada del hombre a la luna o el asesinato de Kennedy

Del mismo modo resaltó momentos difíciles de la historia de El Tiempo, como el incendio de sus instalaciones en 1953, su clausura en el 55, bajo la presidencia de Rojas Pinilla; luego la aparición de ‘Intermedio’ y finalmente el resurgimiento del diario.