El START recibe luz verde para la ratificación en el Senado
La ratificación quedó prácticamente garantizada después de que nueve senadores republicanos hicieran pública su intención de votar a favor.
El nuevo tratado START de desarme nuclear entre EE.UU. y Rusia logró hoy superar el último escollo para su ratificación definitiva por el Congreso estadounidense
En una votación de procedimiento para clausurar el debate en la cámara alta, 67 senadores dieron su apoyo al tratado y 28 votaron en contra, lo que deja el camino allanado para la ratificación definitiva, algo que se espera que ocurra probablemente mañana, miércoles
La ratificación quedó prácticamente garantizada después de que nueve senadores republicanos hicieran pública su intención de votar a favor
Los últimos en anunciar su sí fueron los senadores Lamar Alexander, Johnny Isakson y Bob Bennet
Esos votos contrarrestan la oposición de otros importantes republicanos, como el líder de la minoría en el Senado, Mitch McConnell o el principal negociador de este partido en lo que se refiere al tratado, John Kyl
Los demócratas cuentan con 58 escaños en el Senado pero necesitaban el apoyo de al menos nueve republicanos para alcanzar los 67 votos, equivalentes a dos tercios de la Cámara, que son necesarios para ratificar un tratado internacional, según la ley estadounidense
El nuevo tratado START, que sustituye al de 1991, reduce en un 30 por ciento el número de cabezas nucleares, hasta 1.550 por país, y limita a 800 el de vectores estratégicos, como misiles intercontinentales, submarinos y bombarderos estratégicos
Además introduce un nuevo sistema de inspecciones de los arsenales nucleares, después de que expirara hace un año el START anterior
El presidente estadounidense, Barack Obama, firmó el documento en Praga el pasado abril junto a su colega ruso, Dmitri Medvédev, tras un año de negociaciones entre los dos países
La superación del último escollo para la ratificación representa un importante triunfo político para Obama, que en las dos últimas semanas se ha apuntado varios tantos, como la aprobación en el Congreso de un acuerdo para prorrogar los recortes de impuestos o la abolición, que promulgará mañana, de la ley que prohíbe a los homosexuales declarados ingresar en las Fuerzas Armadas (DADT)
Representa un llamativo cambio de fortuna después de que hace menos de dos meses los demócratas sufrieran lo que el propio Obama describió como "una paliza" en las elecciones legislativas, donde perdieron la mayoría en la Cámara de Representantes y seis escaños en el Senado
Según el portavoz presidencial, Robert Gibbs, la Casa Blanca ha demostrado que el nuevo tratado START sirve para mejorar la seguridad del país, pues establece un nuevo régimen de inspecciones de los arsenales nucleares y ha permitido mejorar la cooperación con Rusia en áreas como la lucha contra el terrorismo o la proliferación nuclear
En su rueda de prensa diaria, el portavoz hizo referencia al START y los últimos logros de la Casa Blanca para hacer un canto a la colaboración entre los dos partidos, "que -dijo- en las últimas dos semanas ha demostrado ser una buena fórmula para este país"
Obama ha aplazado sus vacaciones junto a su familia en Hawai, su estado natal, a la espera de que el Senado apruebe el START
Es posible que el presidente, que mañana promulgará la abolición de la DADT, ofrezca mañana una rueda de prensa antes de partir al archipiélago
La Casa Blanca había lanzado una fuerte ofensiva entre los senadores para lograr el visto bueno a un tratado que representa el mayor logro hasta el momento de la Administración Obama en política exterior
Obama ya había enviado la semana pasada sendas cartas a los líderes demócratas y republicanos en el Senado en favor de la medida y este martes la Casa Blanca publicó otras misivas enviadas hoy a los republicanos Lamar Alexander y Thad Cochran y los demócratas Dianne Feinstein y Dan Inouye
Además, se había pronunciado casi a diario en favor del tratado, que asegura que ha permitido la colaboración de Rusia en asuntos como el tránsito por territorio de ese país de suministros destinados a las tropas en Afganistán o la imposición de sanciones contra el programa nuclear iraní